Proyectos frenados en Hidalgo y Puebla dificultan uso óptimo de la obra en 2019.
Karla Omaña/ Reforma
El gasoducto marino, la gran obra de infraestructura del País y la primera en su tipo en México, comenzará a operar a medias. El gasoducto que irá del sur de Texas a Tuxpan de 800 kilómetros, es el proyecto de mayor inversión entre los licitados en el sexenio y a cargo de las empresas IEnova y TransCanada.
Está planeado para operar a inicios de 2019, pero lo hará parcialmente por estar interconectado con otros dos sistemas que llevarán el gas al centro del País y que no están terminados por conflictos entre la empresa TransCanada, las comunidades y gobiernos locales. Se trata de los ductos Tuxpan-Tula y Tula-Villa de Reyes en Puebla e Hidalgo, cuya inversión conjunta suma mil 12 millones de dólares.
TransCanada argumenta que detuvo las obras por los obstáculos que ha encontrado para desarrollar los proyectos y la falta de interés del Gobierno de Hidalgo para resolver los conflictos con distintos municipios. Sin la entrada en operación de estos dos gasoductos, el marino solo utilizará 60 por ciento de su capacidad diaria que es de 2 mil 600 millones de pies cúbicos.
“Dado que Tuxpan-Tula y Tula-Villa de Reyes están atorados, hay mil millones de pies cúbicos diarios de los 2 mil 600 que no van a entrar hasta que estén esos tubos terminados, por lo que el gasoducto marino se estaría usando parcialmente”, aseguró Guillermo Turrent, director de CFEnergía. “Con todo y estos problemas estaríamos duplicando el acceso a gas natural que tiene actualmente el País”, agregó.
La construcción del Texas-Tuxpan tiene un avance de 96 por ciento y en este momento está en proceso de interconexión con Altamira. El proceso siguiente es esperar un buen clima para poder empujar y jalar los tubos de interconexión entre la costa y el mar, que Turrent estimó sería durante el mes de enero del próximo año.
“Básicamente el tubo está terminado, inclusive ya está una parte del tubo empacado con gas”, agregó Turrent. Asimismo el gasoducto marino potenciará su uso una vez que estén listos los ductos La Laguna-Aguascalientes y Villa de Reyes-Guadalajara, a cargo de la empresa Fermaca y que dará acceso a otros mil 200 millones de pies cúbicos diarios en mayo del próximo año.
Las limitaciones para echar a andar este tipo de infraestructura ha sido una constante en la Administración sexenal que termina. Actualmente hay seis gasoductos en proceso, y todos iniciarán en este Gobierno debido a atrasos derivados de la falta de permisos, problemas con las consultas indígenas y con autoridades locales.