*Reportan 7 muertos, por el huracán, pero la cifra podría ser mucho mayor
Reforma / Staff
FREEPORT.- El rastro de “Dorian” por las Bahamas, el huracán más potente en impactar el archipiélago, dejó escenas de devastación absoluta y una inminente crisis humanitaria.
La violencia de los vientos y las lluvias arrasó hasta 13 mil casas, un 45 por ciento del total de las viviendas de Gran Bahama y las Ábaco, según la Cruz Roja.
Más de 60 mil personas necesitarán comida y agua potable, de acuerdo con oficiales de la ONU. “Es una devastación total. Quedó destruida. Apocalíptico. Parece como si una bomba hubiera explotado”, sostuvo Lia Head-Rigby, quien ayuda a manejar una organización local de asistencia y que realizó un recorrido aéreo por la Isla Ábaco.
“No se puede reconstruir lo que estaba ahí; hay que empezar de nuevo”.
Una foto de satélite de la compañía ICEYE muestra que el 60 por ciento de la superficie de la isla de Gran Bahama quedó bajo el agua a causa de las marejadas y lluvia aparejadas al huracán.
El aeropuerto de Freeport, capital de Gran Bahama, se encontraba sumergido bajo el agua a excepción del último piso. En algunas zonas de la ciudad sólo era visible el tejado de las viviendas y muchas personas se agolpaban en los mismos para esperar a que pudieran ser rescatadas. “Estamos en medio de una de las peores crisis nacionales en la historia de nuestro país”, afirmó el Primer Ministro, Hubert Minnis. “No se escatimarán esfuerzos ni recursos”.
Hasta ayer, se reportó el deceso de siete personas, cifra que podría aumentar, y aún se desconocía la magnitud total del desastre.
“En esta etapa lo que tenemos son datos secundarios ya que, debido a la enorme intensidad del huracán, el Gobierno ha impedido la entrada en la zona y no se podrá acceder hasta esta noche”, explicó Regis Chapman, jefe de la oficina para el Caribe del Programa Mundial de Alimentos de la ONU.
En tanto, las autoridades de emergencia tenían problemas para acceder a las víctimas, en medio de condiciones aún demasiado peligrosas para los rescatistas, quienes exhortaron a la población a resistir.
Prácticamente estacionado sobre una porción de las Bahamas durante un día y medio, “Dorian” azotó las Islas Ábaco y la Gran Bahama, como un huracán de categoría 5, con vientos de hasta 295 kilómetros por hora y lluvias torrenciales. Ambos grupos de islas quedaron completamente destrozas en lo que ya se considera la peor tragedia de la historia del archipiélago.
“Advierto a los bahameños de la posibilidad de que encontremos más personas muertas. Se trata de algo real”, sostuvo el Ministro de Seguridad Nacional, Marvin Dames.