Surgen empresarios en pro del ambiente

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  • Presentan alternativas sustentables para evitar el uso de bolsas, popotes y desechables

 

ESTEPHANY DE LA CRUZ / AGENCIA REFORMA

CIUDAD DE MÉXICO.- Ante la búsqueda creciente de opciones que permitan un menor empleo de bolsas, popotes y desechables, hay quien ha visto la oportunidad en ofrecer variantes.

Evitar que se genere una mayor cantidad de basura en festivales y eventos, sobre todo de vasos desechables, es el objetivo de Circular.

Román Rodríguez, cofundador y director de la empresa, señaló que lo que ofrecen son vasos de plástico especiales para que, en lugar de que las personas usen uno por cada bebida que consumen, el envase sea reutilizado.

Con la participación que Circular tuvo en cinco eventos y festivales con asistencia de 7 mil a 75 mil personas, calculó Rodríguez, se ha evitado que cerca de 500 mil vasos desechables vayan a la basura.

Para utilizar los vasos es necesario dejar un depósito de 30 pesos, adicional al costo de la bebida, mismo que se reembolsa al momento de regresar el recipiente. En tanto, hay algunos que prefieren no acudir por el importe y se quedan con el vaso.

“Hay un porcentaje de personas para las que el vaso es como un souvenir; predica que el vaso es reutilizable, para usarse en casa, entre compas, ya no más los desechables”.

Para fabricar los vasos de reuso se emplea una cantidad de energía similar a la de los desechables y, de acuerdo con Rodríguez, para la limpieza de los recipientes se hace un lavado en máquinas, mismas que indican un gasto de 0.03 centilitros de agua por cada uno.

 

Dan segunda vida

 

Desde el bote de shampoo hasta la botella de aceite dejan de ser basura con la propuesta de Renovadora Sustentable, que crea mesas para jardines y hasta muros para escuelas con el plástico que las personas desechan.

Ricardo Rivera, director de la empresa, dijo que la idea es aprovechar la misma propiedad del plástico para transformarlo en productos que puedan durar hasta 100 años para que así no sean desechados a corto plazo.

“Todo lo que va a la basura es lo que nosotros estamos reciclando, existe una mala idea de que ya no dando bolsas vamos a solucionar el problema del plástico, no es cierto; aquí el problema del plástico es mucho más grande en el envase que en la bolsa”.

En Renovadora utilizan el plástico triturado para elaborar tableros que pueden ser tan versátiles como la madera, pero más resistentes, y representan una alternativa a otros materiales, como el acero y la fibra de vidrio.

Con el material resultante de la trituración del plástico han hecho desde comederos para animales, mesas de picnic, casas para mascotas, cercas e incluso muros para escuelas.

De acuerdo con Rivera, la empresa hace uso de alrededor de 20 toneladas de plástico cada mes, y ejemplificó que para elaborar una mesa estilo picnic se requieren alrededor de 70 kilogramos de ese material.

 

Aunque la empresa tiene 35 años fabricando esas mesas, el director resaltó que en dos años, desde que la compañía apuesta más por la sustentabilidad, vendió 400 comederos.

 

Eliminan los empaques

 

Dejar de lado el plástico para empacar productos es posible en Lado Verde, que invita a clientes a llevarse lo que compran en frascos y bolsas de tela.

Carla Lomelí, CEO de la empresa que comercializa desde semillas hasta productos para la limpieza del hogar, compartió que la idea de su negocio surgió luego de ver que su familia compraba a granel, guardaba sus compras en frascos para mantener la frescura y tiraba las bolsas que tenían poca utilidad.

Fue así como decidió abrir un espacio donde las personas pudieran llevar sus envases y tuvieran productos naturales al alcance.

“Cuando empecé fui la primera tienda ‘zero waste’ de Guadalajara, entonces llegaban a preguntar ‘¿Esto cómo funciona?, ¿Cómo le hago?’ Pero poco a poco la mayoría de los clientes traen sus bolsos, sus frascos. Es padre ver aquel que primero dijo: ‘ay bueno, me voy a comprar mi botella porque yo no tengo’, y ahorita ya la viene a rellenar cada mes”.

En el negocio también se ofrecen bolsas de tela con diseños. Las hay para la despensa y botanas, de fibra natural para frutas y verduras, para productos a granel o alimentos y bolsas para popotes de metal.

El costo de las bolsas va desde los 60 pesos y hay juegos que cuestan 320. Parte de la ganancia es donada a fundaciones.

Además, como alternativa a los plásticos, cuenta con cubiertos de madera que elabora y comercializa junto con artesanos locales, y toallitas desmaquillantes lavables. También tienen frascos a la venta.

 

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