- Especialistas lamentan que por la cuarentena no haya juzgados disponibles para atender casos de violencia intrafamiliar.
RUBÉN TORRES
CANCÚN, Q, ROO.- Es ridículo que algunas fiscalías del país argumenten que la violencia intrafamiliar por la cuarentena a causa del Covid-19 haya disminuido, plantearon expertos e investigadores.
Ante la “caída” de denuncias al 911 y otras redes, no hay juzgados disponibles y las víctimas no ven cómo burlar el acoso de sus agresores por el confinamiento, estimaron.
Durante la mesa de análisis: “El Enemigo en casa: Aumento de la Violencia Intrafamiliar durante la Cuarentena”, se detalló que, hoy más que nunca, existe una cifra negra porque las mujeres no pueden salir a presentar las denuncias, tampoco vía telefónica porque están vigiladas.
A través de la videoconferencia auspiciada por Causa en Común, señalaron que desde fines de marzo, son más ciertas aquellas expresiones de que “el secreto de todo queda en familia y en cuatro paredes” o “la violencia intramuros es silencio”.
Recordaron que, a causa de que 50 por ciento de los mexicanos está bajo el aislamiento social, 35 por ciento está entre que sale y no, mientras el 15 por ciento restante continúa laborando’, entre ellos personal de los sectores salud, seguridad y limpieza.
Anayeli Pérez Garrido, de la Asociación Justicia Propersona, planteó que es innecesario ese tipo de informes que minimizan el problema, porque la “cifra negra” se incrementó al no poder salir a denunciar agresiones contra mujeres niños, adolescentes o adultos mayores.
Esto, al estar bajo la vigilancia de los agresores, tal y como lo exponen las cifras de 17 entidades. “Del resto no se conoce más”.
Violencia ya estaba
Juan Martínez Pérez García, de la Red por los Derechos de la Infancia en México, manifestó que la violencia ya estaba, pero la crisis por el Covid-19 la agudizó.
La inmovilidad reduce de igual forma la capacidad de las autoridades para investigar, y de acuerdo con el Inegi, 66 por ciento, que son 30.7 millones de mujeres del país, sufre violencia, y 43 por ciento padeció agresiones de su pareja en alguna ocasión.
Los tipos de violencia, explicó, son golpes, abuso sexual y violación simple, pero el estupro es una puerta giratoria, debido a que, en el tipo penal, se estima que hubo algún tipo de consentimiento.
Por su parte, Marcela Eternoud Arambúro, feminista y especialista en estadísticas de género, dijo que una de cada dos mujeres ha sufrido violencia intrafamiliar.
Aunado a que, de acuerdo con el Instituto Nacional de Geografía, Estadística y Geografía, 73 por ciento de las viviendas del país cuenta con uno o dos cuartos, lo que genera violencia intramuros por hacinamiento.
“Lo que está sucediendo por el virus es inadmisible, él no está en cuarentena, no está acotado, sino en la calle”.
María Elena Morera, presidenta de Causa en Común y Pilar Déziga, investigadora de la misma organización, plantearon que el coronavirus vino a exacerbar lo que ya se tenía.
“Es una tormenta perfecta, va a desencadenar un grave deterioro de salud mental, porque agresores y víctimas están obligados a compartir el espacio; las soluciones son muy complejas, pero se puede avanzar con una política pública de género más severa”, indicó Morera.