- Especialistas han insistido en que no se debe consumir dióxido de cloro con tratamiento para el Covid-19, porque no cura la enfermedad.
OMAR ROMERO
CANCÚN, Q. ROO. – Pueden llegar a ser graves los efectos provocados por el dióxido de cloro en el organismo de una persona, y en ocasiones irreversibles. Por ello, especialistas han insistido en que no se debe consumir con tratamiento para el Covid-19, porque no cura la enfermedad y en cambio perjudica más al paciente.
Con el aumento de casos positivos por el virus SARS-CoV-2, a través de redes sociales han surgido personas que ofertan esta sustancia como remedio para curar la enfermedad, sin embargo, la ingesta de este compuesto puede resultar muy dañina.
Nayeli Sánchez Guevara, bióloga con posgrado en Ciencias Bioquímicas en el Instituto de Biotecnología, y actualmente académica, expresó que esta sustancia se utiliza para blanquear papel y limpiar superficies, por lo que no tendría que estar consumiéndose por la gente, ya que no está comprobado que ayuda a combatir el virus.
“De hecho, creo que es muy grave que, si alguien no sabe de química, no sabe de biología, no sabe de bioquímica, no es un farmacéutico, no debería estar por ningún motivo proponiéndole a los demás el uso de dióxido de cloro, porque uno no conoce la fisiología de la otra persona, no conoce las condiciones médicas de las otras personas”.
Además del dióxido de cloro hay otros productos que de cierta manera se han puesto de moda, no obstante, consideró que no son más que placebos, es decir, se trata de una sustancia que carece de acción curativa y genera un efecto terapéutico, pero no combate esta enfermedad.
El consumo directo puede provocar daños en el sistema digestivo, neurológico, cardiovascular, respiratorio, dermatológico, ocular y en los riñones, que en ocasiones son irreversibles.
“Hay que tener mucho cuidado y no hay que irse con lo que el vecino o la persona de al lado te dice; siempre hay que recurrir con los especialistas adecuados, porque de lo contrario pondríamos en riesgo nuestra salud. Se ha visto que esta sustancia puede causar daños que no son inmediatos, pero a largo plazo se resienten las secuelas”.
En tanto, la secretaria de Salud en la entidad, Alejandra Aguirre Crespo, insistió a la población no automedicarse con dexametasona, ivermectina o antibióticos como azitromicina, ya que lejos de ayudarse, empeoran su situación.
“Hacer uso de cualquiera de estos medicamentos sin prescripción médica podría agravar el estado de salud”.
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