Acercan tarea a niños en riesgo

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  • En grupos pequeños, dos maestras se encargan de ayudar a niños de diferentes edades con las tareas que les envían sus profesores.
DANIEL SANTIAGO CRUZ / AGENCIA REFORMA

MONTERREY, N.L.- Un local que antes de la pandemia funcionaba como comedor comunitario y ludoteca en la Colonia Los Valles, en Juárez, es ahora también un club de tareas donde niños y niñas reciben ayuda presencial para su educación a distancia.

En grupos pequeños programados a lo largo de la semana, dos maestras se encargan de ayudar a niños de diferentes edades con las actividades que les envían sus profesores y, de manera especial, a quienes presentan rezago académico.

La iniciativa es de Nicniuh, A.B.P., que desde hace 21 años ha implementado programas de empoderamiento de mujeres y niños en este sector en donde coexisten problemáticas sociales como pandillerismo, adicciones, violencia intrafamiliar y desempleo.

En noviembre, al detectar una fuerte preocupación de las mamás por las clases en línea y televisión, la asociación buscó la forma de ayudarlas.

“Nos solicitaron clases de apoyo”, dijo Eduardo Sánchez de la Garza, fundador de la asociación.

En esta comunidad que abarca unas seis colonias se repiten los problemas emergidos durante el año escolar: desde la falta de tecnología para tomar clases a distancia hasta la frustración de mamás por no poder acompañar a sus hijos en el aprendizaje.

“Hay un nivel de frustración muy alto en muchas mamás que se ven incapacitadas de ayudar a sus hijos en temas de biología, matemáticas, aritmética, en donde ellas no cuentan con las herramientas por el nivel (educativo) que tienen”, señaló Sánchez de la Garza.

“Eso lamentablemente redunda en este rezago académico que estamos viendo a nivel nacional”.

Así, con sillas y mesas alineadas como en un salón de clases, Nicniuh sumó este servicio que para la comunidad era urgente, el de un club de tareas en tiempos de pandemia.

Impacto emocional

En su exterior, el inmueble luce con cierto deterioro y sin ningún anuncio que indique lo que ahí se realiza. Al interior, todo está organizado y ordenado para ayudar a la comunidad.

Hay una cocina donde cada semana se preparan alimentos para distribuir entre los que más los necesitan, además de varios anaqueles con libros, cuentos y juegos de mesa que dan forma a la ludoteca “Mi mejor amigo” (el significado del vocablo náhuatl “Nicniuh”).

Nicniuh contrató a dos maestras para el club. Ambas estudian carreras relacionadas con educación y son vecinas del sector.

“Lo que hacemos es darle continuidad a las tareas que traen de sus escuelas”, comenta Lluvia García, de 18 años, quien estudia la Licenciatura en Educación en la Universidad Metropolitana de Monterrey.

“Los ayudamos con lectura, con las operaciones básicas de matemáticas. Les damos herramientas para que puedan hacer sus tareas solitos”.

En el salón hay también una computadora y una impresora en la que los niños pueden imprimir sin costo los cuadernillos de actividades que les envían de sus escuelas.

Ésa fue otra de las necesidades detectadas en noviembre.

Las mamás reportaron esa vez un gasto de 100 pesos semanales en los “ciber” para imprimir el material escolar.

Durante la semana, unos 42 niños acuden protegidos con cubrebocas en diferentes horarios y en grupos de cuatro a seis estudiantes para mantener los protocolos de salud. Cada sesión dura dos horas.

Al final, los chicos aprovechan los juegos de la ludoteca.

“Jugamos en pequeños grupos porque no podemos tener tantos niños, pero los chicos se divierten bastante y les gusta venir mucho”, contó Priscila González, la otra maestra, de 17 años y quien tiene la carrera técnica de asistente educativo.

Para Lluvia, su compañera, el impacto de este apoyo ha sido académico, pero también emocional.

“Habían estado encerrados todo el tiempo y frustrados con la tarea”, dijo.

“Pero al salir y venir aquí ven a otros compañeros, aunque sea poquito, y eso les ha ayudado a que mejoren en la escuela, porque si están bien emocionalmente tienen la capacidad de hacer las tareas de una mejor manera”.

Ven mejoría

Sofía Barrios cuenta que en estos meses ha visto cómo su hijo Rogelio, de 12 años, ha mejorado en matemáticas y ahora va por la lectura.

“Ha aprendido más. Le está yendo muy bien”, comentó.

Durante el año escolar, especialistas y maestros han alertado por una crisis educativa profunda ante la falta de escuela presencial, al mismo tiempo que han llamado a abrir espacios con pequeños grupos y con medidas de protección para evitar contagios.

De acuerdo con los directivos de la asociación, hay otros 45 niños del sector que desean acudir al club, pero no es posible atenderlos debido a las limitaciones por los protocolos de salud y la falta de recursos para pagar a más maestras.

La asociación requiere de ayuda para este trabajo social y educativo, desde alimentos para la cocina comunitaria, hasta hojas de máquina para imprimir las actividades de los chicos.

Ellos, como muchos en México, están en un alto riesgo de agudizar su rezago.

CONTACTO

La asociación Nicniuh requiere de donativos en especie y efectivo para su comedor, ludoteca y club de tareas:

  • Tel. 811-586-5152
  • Facebook: nicniuhabp
  • Mail: asociacion_nicniuh@hotmail.com
  • Transferencias en Afirme
    Cuenta 11001005938
    Clabe 062580110010059389

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