POR KUKULKÁN
LA INSEGURIDAD y la violencia han aumentado sistemáticamente en los últimos años en el País. Ninguna de las entidades de México se salva, desde el sur hasta el norte. Los índices provenientes de los estudios de percepción de seguridad entre la población que realiza constantemente el INEGI han colocado a Cancún en el top de las diez ciudades “más inseguras” a pesar de los esfuerzos del gobierno estatal por contrarrestarlo pero que ha sido infructuoso. Y en el top de los 100 se ha colado el ahora famoso Tulum. Por ejemplo, la investigación de la banda de “empresarios”, disculpe usted, pero así les gusta que los llamen mientras las autoridades federales no sentencien lo contrario, de nacionalidad rumana fue un golpe activado desde la secretaría de Seguridad Pública de Quintana Roo.
FLORIAN TUDOR, un tiburón con mucha velocidad y, sobre todo, dinero en los bolsillos, ha podido burlar a las autoridades federales a pesar de los reportajes de investigación que cercaron y evidenciaron todo el teje y maneje de este grupo al que calificaron como la Mafia de la Riviera Maya. Eso desactivó un conglomerado de negocios oscuros, pero dejó una cola de confabulaciones en los sótanos que ahora comenzamos a ver. El Gobierno de México debe desactivar y actuar en consecuencia, porque desde que la UIF admitió que investigaba a varios sujetos involucrados con los rumanos se cercaron todas las informaciones oficiales del asunto. La especulación, por consecuencia, hace más daño.
PERO ESO no es el fondo del problema, sino el grado de descomposición que están sufriendo los cuerpos policiacos de gobiernos municipales, muchas veces cooptados por las mafias del narco y las dedicadas a la delincuencia desorganizada, desde el homicidio, robo de autos y secuestro. Todo un coctel de gente fina trabajando por el mal del estado y su sociedad. Cancún y Quintana Roo están en boca de todos por inseguridad, pero debe desactivarse cuanto antes con acciones concretas por el gobierno federal. Las actuaciones del Estado de Quintana Roo no han sido suficientes, cierto, y los municipales cada vez quedan más evidenciados de la corrupción.
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CONFORME SE acercan los tiempos electorales cualquier tema será magnificado si conviene a cierto candidato o partido, y otros minimizados si van contrarios a los intereses de otros grupos. Las cuerdas se tensarán, como lo vemos ahora. No es para verlo “normal”, sino para hacer un análisis menos erróneo de la situación que vivimos. Quintana Roo está en fechas extraordinarias, de mucho trabajo y mucho turismo. Toca también ser más responsables en esta crisis desatada por intereses contrarios a algunos medios que echan más gasolina, diesel y gasavión en el centro del fuego. Seguramente también saldrán chamuscados.
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ADEMÁS ES el tiempo de los buitres en asuntos como los que se viven en Quintana Roo. Ahora ya salió Isabel Miranda de Wallace a dar opiniones furibundas contra la violencia (habrá alguien que en su sano juicio se oponga a esto) por supuesto que no, pero como la Wallace que quiere ganar reflectores hay varias. Esto lo comentamos en este nido porque la señora Wallace tiene una investigación que no ha aclarado sobre la supuesta muerte de su hijo. Varios han publicado fotos del joven viviendo una vida de rey en Europa. La señora Wallace siempre, siempre, nunca falla, en este tipo de escándalos aparece como una especie de ángel de salvación. ¿Qué negociará ahora?
