- El comisario Ricardo Villegas recordó que las armas de fuego son responsables de la mitad de los homicidios cometidos en el mundo.
STAFF / LUCES DEL SIGLO
LYON, FRANCIA.- La Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) asestó un “duro golpe” al tráfico de armas en América Latina en una operación que permitió requisar más de 200 mil armas de fuego, explosivos y otros componentes.
“Es una de las operaciones más importantes, porque estamos en un contexto de pandemia (…) En ese sentido creo que es una operación única”, señaló el comisario Ricardo Villegas Pávez, uno de los coordinadores del operativo.
En 13 países de la región realizó 4 mil arrestos y desarticuló laboratorios de fabricación de drogas, con la operación Trigger VI.
Los arrestos e incautaciones tuvieron lugar en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guayana Francesa, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.
El operativo permitió abrir nuevas líneas de investigación de otros delitos que se irán desarrollando en los próximos meses.
Lanzada en septiembre de 2019, el operativo duró tres semanas, en coordinación con las policías de los trece países implicados y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc).
Ricardo Villegas explicó que Trigger VI pone de manifiesto la importancia de cooperar entre países para atajar una delincuencia internacional que no respeta fronteras.
“Tiene zonas de producción, tránsito y distribución que no atienden a los enfoques tradicionales basados en las soberanías nacionales”.
Los logros…
Entre los logros de la operación destaca el arresto de integrantes de una banda criminal en Uruguay que usaban las redes sociales para promover la violencia o la incautación en Perú de ingentes cantidades de munición procedente de la triple frontera entre Brasil-Argentina y Paraguay.
En Lima se incautaron granadas sin detonar en una intervención que dio lugar a un tiroteo, mientras que en el conjunto de los países se han requisado hasta 90 mil piezas de munición.
Ricardo Villegas recordó que las armas de fuego son responsables de la mitad de los homicidios cometidos en el mundo.
En América, con 13 por ciento de la población, es escenario de 37 por ciento de los asesinatos, aunque el porcentaje llega hasta 65 por ciento.
Agregó que las restricciones impuestas por la Covid no han reducido el tráfico de armas, ya que el crimen organizado “se adapta a la situación”, lo que obliga a los sistemas policiales a evaluar cómo mutan esos fenómenos y adecuar su respuesta.
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