- El diputado Luis Fernando Chávez Zepeda señaló que tras el incidente en Isla mujeres, es necesario revisar la infraestructura y personal en Protección Civil y Bomberos.
RUBÉN TORRES
CANCÚN, Q. ROO.- Las 41 mil hectáreas siniestradas en 2020 por incendios forestales, de las cuales 2 mil 400 ocurrieron en el municipio de Benito Juárez, y tras el reciente incendio que consumió 10 locales comerciales en Isla Mujeres, obliga a “revisar la infraestructura e incremento del personal en Protección Civil y Bomberos”, señaló Luis Fernando Chávez Zepeda.
El presidente de la Comisión de Seguridad Pública y Protección Civil en la XVI Legislatura, consideró que no es suficiente con anunciar “medidas preventivas, sino contar con el suficiente personal para la reacción inmediata en el combate de los incendios forestales ocasionados por el cambio climático y por el hombre”.
En razón de esto, el diputado del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), de manera personal en la tribuna del Congreso del Estado y posteriormente en un punto de acuerdo aprobado, exhortó a los 11 municipios de Quintana Roo que “informen a la brevedad la recaudación monetaria de los años fiscales 2019 y 2020”.
Esto en referencia sólo al concepto de Protección Civil y H. Cuerpo de Bomberos, así como “la inversión en equipamiento, infraestructura y aumento de personal en estos años de su administración, debido a que se sigue padeciendo de herramientas necesarias para atacar los incendios forestales, pastizales o zonas sensibles al fuego”.
El legislador expresó que el estado tiene una “excelente cultura de medidas preventivas y atención en caso de tormentas tropicales, ciclones o huracanes”, por lo que se debe poner énfasis también en casos de incendio, y dotar de herramientas y protocolos de prevención al personal de Protección Civil y Bomberos.
Chávez Zepeda estimó que se debe adelantar en la prevención para “las palapas o construcciones rústicas hechas con base de maderas, guano o pasto seco”.
Con el personal de Protección Civil y Bomberos, dentro de sus múltiples funciones que prestan, “encontramos que están —entre otras— la prevención, auxilio y apoyo a la población con motivo de desastres, catástrofes y siniestros”.
Sin embargo, el análisis arroja que ellos trabajan con “equipos viejos y en mal estado, vehículos casi inservibles, trajes en el caso de los bomberos que no garantizan un retardante efectivo ante la presencia del fuego, cascos dañados”, mangueras para combatir el fuego bastante deterioradas e incluso parchadas por la presencia de huecos como consecuencia del tiempo de uso de las mismas y uniformes de mala calidad”.
Lo que podría generar en su accionar no poder “enfrentar y atender contingencias como un derrumbe o un incendio y evitar con esto una posible lesión a una persona o peor aún la pérdida de una vida”, resaltó el diputado.
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