NIDO DE VÍBORAS

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NIDO DE VÍBORAS

POR KUKULKÁN

LAS IMPUTACIONES en contra de Pablito Bustamante, líder estatal del Partido Verde Ecologista en Quintana Roo, por prestarse a simular un juicio laboral para apropiarse de un lujoso departamento en Puerto Cancún es un golpe directo a la línea de flotación de la campaña de la alcaldesa con licencia Mara Lezama, quien debe actuar rápido y solicitar a su compañero de fórmula que deponga la candidatura para enfrentar su proceso en calidad de ciudadano, porque su permanencia en la planilla electoral ya es tóxica para todos sus integrantes.

EL JOVEN afortunado, que desde los 16 años de edad se dedicaba a la venta de ‘tiempos compartidos’ para la empresaria Érika García, ganando un sueldo mensual de 90 mil pesos durante diez años, y a la cual terminó enfrentando en un juicio laboral por “despido” injustificado que al final, como estaba fríamente planeado, favoreció a Pablito Bustamente para quedarse con el departamento de lujo en Maioris Tower Cancún para regresarlo a la madre de su mejor amigo el diputado Gustavo Miranda, también del Partido Verde Ecologista; todo fue una simulación.

POR ESTOS hechos tanto la Fiscalía General del Estado como la Fiscalía Anticorrupción ya iniciaron las respectivas investigaciones pues, ahora se sabe, la empresaria hotelera repitió este esquema de fraude al menos en tres ocasiones, que básicamente consistió en la solicitud de un crédito bancario para la compra de un inmueble y ya después de un tiempo dejar de pagarlo para simular un juicio laboral que terminan ganando los amigos y socios del diputado Gustavo Miranda, hijo de la empresaria Érika García.

CUANDO MENOS el diputado tendría un grado de complicidad en estos hechos porque si bien no interviene directamente en ellos, sí estuvo enterado en todo momento de que se estaban cometiendo ilícitos y no los denunció como establece la norma, por el contrario, los consintió por ser del interés de su señora madre y de lo que indirectamente él mismo estaba sacando provecho, ¿por eso guardó silencio?

EL RETO de la candidata del Verde, en alianza con Morena y PT, es repetir la hazaña histórica de 2018 cuando obtuvo casi 192 mil votos, con Andrés Manuel López Obrador en la boleta. Mara Lezama asegura que volverá alcanzar esa cifra y el triunfo contundente, arrollador de hace tres años; inclusive ha hecho mofa de que ella solita atrajo esos votos, que por el contrario ella le aportó a AMLO y al Verde Ecologista tampoco le debe algo, por el contrario, le va sumar a un partido que en las pasadas elecciones de gobernador, 2016, apenas alcanzó el cuatro por ciento de la votación, 51 mil sufragios de una lista nominal de electores de 1 millón 250 mil.

CON LA BANDERA de Morena y la anuencia de la dirigencia nacional, Jorge Emilio González “El Niño Verde” ha impuesto a otros candidatos cuestionados por su pasado como son los casos de los presidentes municipales con licencia de Puerto Morelos e Isla Mujeres, Laura Fernández y Juan Carrillo, respectivamente, quienes competirán para diputados federales.

LA PRIMERA FUE impulsada en la política estatal por el ahora ex gobernador priista Félix González Canto que en 2008 la hizo diputada local y de ahí fue escalando otros cargos, compitió por una diputación federal, pero la perdió y de ahí se logró colar a la presidencia municipal de Puerto Morelos por dos periodos, ejerciendo el poder para beneficio de los intereses de su grupo político y su familia.

EN LAS MISMAS está el priista Juan Carrillo, pupilo de Roberto Borge, quien en su tiempo de gobernador llegó a emplearlo como el golpeador para meter la tenebra a los adversarios con tácticas como la quema de autos o de viviendas por oponerse a los intereses del grupo en el poder; estos son los funcionarios del “cambio” que prometió el gobierno de la 4T, más de lo mismo.

@Nido_DeViboras