POR KUKULKÁN
SÓLO UNOS VIVALES como los hermanos Beristain Navarrete, dominados por su vulgar ambición de seguir haciendo negocios privados desde el poder, se resisten a escuchar el mensaje del presidente Andrés Manuel López Obrador en el sentido de que si alguien ha sido respetuoso y neutral en los diferentes procesos electorales de Quintana Roo, particularmente de los recientes comicios donde se eligió a los once presidentes municipales, ha sido el gobernador Carlos Joaquín González, quien así actúa no por miedo al poder federal o por acuerdos en lo oscurito sino por su convicción democrática.
AHORA LA DERROTADA Laura Beristain pretende ganar por la vía del chantaje y del escándalo mediático la reelección en el municipio de Solidaridad al no lograr retenerla a través de los resultados de las urnas el pasado domingo 6 de junio; con engaños como ha sido su estilo hizo creer al líder nacional de Morena, Mario Delgado, que había sido víctima de un imaginario fraude y él mordió el anzuelo difundiendo en sus redes sociales que no permitirían el atraco, aunque pronto cayó en la cuenta de que había sido un garlito de la alcaldesa desesperada por ver venir de cerca no sólo su ocaso en la política sino también el de sus hermanos Luz María y Juan Carlos.
LA MISMA TRAMPA le puso a la presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Rosario Piedra Ibarra, engañándole de que había sido víctima de violencia electoral de género y hasta difundió una fotografía con ella en señal de respaldo, pero tampoco prosperó su tinglado, y entonces recurrió a lo “legal” promoviendo una denuncia ante la Fiscalía Especial de Delitos Electorales que seguro no va a cambiar en nada los resultados porque en el conteo de votos se demostró que fue ampliamente apabullada por su adversaria Lili Campos Miranda, alcaldesa electa para el próximo trienio.
SE LE OLVIDA a la alcaldesa derrotada que si hace tres años ganó por mínima diferencia de votos fue porque AMLO venía en la boleta, no porque ella tuviera popularidad o arrastre en el municipio, sin embargo no aprovechó la oportunidad histórica que le dio la vida, pronto demostró incapacidad e improvisación para gobernar con puras ocurrencias que al final le costaron la derrota que ahora se niega reconocer; la sensación que existe entre los solidarenses es que en todo este tiempo hubo un notable retroceso, se cayó la economía local y no fue por la pandemia como pretende hacer parecer sino por sus malas decisiones.
LO QUE REALMENTE preocupa a los hermanos es que se les acabó la forma de hacer negocios turbios al amparo del poder; la reciente grabación donde se escucha a Luz María exigirle —en calidad de intrusa porque no tiene algún cargo público— a un funcionario municipal que le pasara la lista de hoteles y comercios locales que ya habían contribuido, o no, para la campaña de Laura, fue la gota del descaro que derramó el vaso; y aunque la ex senadora trató inútilmente de persuadir que habían sacado su diálogo de contexto, que eran ataques provenientes del gobierno del estado y que aclararía los hechos, jamás sucedió porque en el audio está claro que estaban pasando la “charola” en nombre del movimiento de la 4T y del propio Andrés Manuel.
COMO BOOMERANG se les regresó su pretendida extorsión al empresariado y el propio Presidente se encargó de demostrarles que ya no es lo mismo que antes y que no va a permitir que pillos como los hermanos Beristain sigan teniendo cabida en la política lo cual es plausible; lo que espera la sociedad es que los actos de corrupción que cometieron no queden impunes, que se les investigue y castigue como ejemplo para que este tipo de vividores de la política vayan siendo menos.