- El Covid redujo de 52 a 46 por ciento la participación de las mujeres en el mercado laboral, lo que afecta el sistema de ahorro para el retiro.
CHARLENE DOMÍNGUEZ / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- La pandemia, fragmentación de los sistemas pensionarios y la ausencia de portabilidad está dejando efectos más rudos para las mujeres, advirtió la Comisión de Ética e Integridad de la Coparmex.
El Covid redujo de 52 a 46 por ciento la participación de las mujeres en el mercado laboral, pues muchas estaban en sectores muy dañados como el turístico y restaurantero.
La intermitencia laboral de las mujeres entre el mercado formal e informal hace que se tengan diferentes trabajos y eso afecta más a quienes migran de un sistema de ahorro a otro porque no se permite que se haga en una sola cuenta, dijo Leonor Quiroz, presidenta de la Comisión de Ética e Integridad de Coparmex.
“Si estás en el ISSSTE o IMSS hay posibilidad universal, pero si estamos en otro sistema de ahorro insisto, municipal, estatal, universidades públicas, no estamos juntando nuestra bolsa en una misma cuenta y esto además de impactar los recursos lo hace en semanas de cotización.
“La fragmentación de sistemas también está siendo mucho más ruda con nosotras las mujeres”, advirtió Quiroz al participar en el webinar “El Sistema de Ahorro para el Retiro a 24 años de su creación”.
La especialista recalcó que la desigualdad pensionaria con las mujeres está acompañada de una serie de elementos que engloban el hecho de que las que realmente pueden cotizar para su retiro son menos de 40 por ciento, cuando representan más de 50 por ciento del mercado laboral.
A esto se suma la desigualdad salarial porque desgraciadamente, aunque sea un trabajo igual al de los hombres, las mujeres tienen un menor salario y esto impacta de manera directa la tasa de contribución.
“Además de que cotizamos menos de 40 por ciento de las mujeres versus los hombres, 91 por ciento de las mujeres cotiza en el sistema con menos de cinco salarios mínimos.
“Las mujeres tienen menos densidad de cotización porque tenemos menor estabilidad en el empleo y se debe a la intermitencia más profunda que tenemos por las labores de cuidado”, destacó la presidenta de la Comisión de Ética e Integridad de la Coparmex.
Otro elemento que agrava la desigualdad pensionaria es que al hecho de que las mujeres cotizan menos, se debe sumar que tienen que hacer que sus ahorros duren más porque la esperanza de vida para ellas es más larga que la de los hombres.
El Consejo Nacional de Población estima que la esperanza de vida en mujeres es de casi 78 años, contra los 72 años de los hombres, dimensionó.
“Tenemos ahí casi seis años más que cotizar versus los hombres, entonces menos ahorro para más tiempo”, expuso.
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