- Naomi Watts presentó el filme Lakewood en el Festival Internacional de Cine de Toronto, en el que trabajó de la mano del director Phillip Noyce.
JUAN CARLOS GARCÍA
CIUDAD DE MÉXICO.- A Naomi Watts le guiñó el ojo el filme Lakewood por el simple hecho de trabajar con el director Phillip Noyce y por desafiarse a llevar casi todo el peso de la historia.
La actriz inglesa, de 52 años, conversó sobre el largometraje que acaba de estrenar en el Festival de Toronto (TIFF) y acotó algunos puntos sobre su labor, que incluyen el crédito de coproductora.
“Hay un encierro en el filme, y todos pasamos por un encierro, al que nos obligó toda esta situación sanitaria.
“Yo me fui a un encierro con mis hijos a una casa en un lago antes de rodar. Ellos no estuvieron muy felices en cierto periodo, pero esta idea de estar casi en todo momento en el filme, y sola, más su hijo, me atrajo profundamente”, platicó la actriz, quien fue nominada al Óscar por 21 Gramos y Lo Imposible.
En esta producción, la ex pareja de Liev Schreiber, con quien tiene dos hijos, da vida a Amy Carr, una madre que debe correr contra el tiempo cuando se percata de que las autoridades van tras un asesino que está disparando al azar y que su hijo, Noah, puede estar a su alcance.
Amy obtiene en su celular al único aliado para localizar a su pequeño, con el propósito de que pueda sobrevivir al ataque, y desafía todas las normas impuestas por los agentes para escapar y ayudarlo. Eso le atrajo para coproducir la película.
“Si te obsesionas con los resultados finales, te pierdes el momento del proceso y te preocupas por situaciones ajenas a ti.
“En mi papel de actriz y coproductora era muy interesante otorgarle mi voto de confianza a todo el proyecto, y fue un trabajo de confianza absoluta”, expresó Watts, protagonista del thriller, de 80 minutos y que aún no tiene fecha de estreno en México.
La artista, quien actualmente sostiene una relación con el actor Billy Crudup, a quien conoció en la teleserie Gypsy, afirmó que Lakewood, la cual filmaron durante la pandemia, es una prueba de la capacidad de adaptación de los creadores de cine.
“Hemos aprendido a ajustarnos a presupuestos, a mejorar condiciones de trabajo. Hemos sabido sobrevivir, y fueron tiempos sumamente complejos, a los que nos pudimos adaptar. “Yo celebro y aplaudo que haya muchos filmes que se hayan podido crear durante la pandemia y con todos los cuidados y celebro que se esté haciendo un festival y que se presenten películas. Es un gran esfuerzo”, dijo.
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