- La apertura de un fideicomiso por parte de Morena, alimentado con recursos de sus comités estatales, para comprar inmuebles, provocó ayer el enfrentamiento entre consejeros del INE.
ÉRIKA HERNÁNDEZ / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- La apertura de un fideicomiso por parte de Morena, alimentado con recursos de sus comités estatales, para comprar inmuebles, provocó ayer el enfrentamiento entre consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) y representantes de ese partido.
El 28 de diciembre de 2020, recién nombrado Mario Delgado como presidente de Morena, la dirigencia abrió un fideicomiso para la compra de oficinas en los estados.
Aunque la figura bancaria es legal, la Unidad de Fiscalización del INE determinó que la triangulación de 372 millones de pesos de comités estatales está prohibida.
Además, las dirigencias locales transfirieron otros 866 millones al CEN morenista, y que la Unidad de Fiscalización determinó que no se sabe su destino.
Este tipo de transferencias sólo está permitido en el caso de pagos a proveedores, servicios e impuestos.
“A lo largo de 2020, Morena renunció a 826.9 millones de pesos de financiamiento público federal, así que mientras por un lado se anunciaba con bombo que se renunciaba al financiamiento federal, se absorbía el financiamiento local por mil 239 millones de pesos, quedándole un saldo a favor al partido de más de 412 millones de pesos”, expuso el consejero Ciro Murayama.
Los representantes de Morena acusaron al INE de elaborar un dictamen con mentiras y dolo, para dañar las finanzas de su partido, pues, afirmaron, se conoce el destino de esos recursos, y el fideicomiso no tuvo objeción de la autoridad cuando se reportó.
Mario Llergo argumentó que se determinó crear un solo fideicomiso para dotar de oficinas al partido en los estados, y el resto de los recursos fueron para el pago de proveedores y nómina.
Por ejemplo, indicó, Baja California Sur le transfirió al CEN 8 millones 400 mil pesos, y una vez que se compró el inmueble, en 7 millones 607 mil pesos, se le devolvió a la dirigencia “en especie” su aportación.
Excesos y privilegios
El consejero Uuc-Kib Espadas cuestionó por qué los morenistas califican de robo a la nación el fideicomiso del INE para compra y construcción de inmuebles, y el creado por su partido es legal y sirve a la democracia.
En respuesta, el representante morenista César Hernández, argumentó que su partido ganó la elección de 2018 con 30 millones de votos, y por ello exige anular excesos y privilegios.
“Para usted, el volumen de votación de una fuerza política determina la virtud o no de un fideicomiso, de forma tal que un partido con 30 millones de votos está legitimado para hacer un fideicomiso, pero una institución que protege los derechos de 92 millones de electores, entonces no es legitimada. No comparto su punto de vista”, reviró el consejero.
El Consejo General aprobó que de los 372 millones del fideicomiso de inmuebles, el partido devolverá lo que no haya gastado.
Además, Morena deberá reintegrar 866 millones de pesos que los comités estatales transfieron al CEN.
“Me temo que existe un ánimo de lastimar las finanzas de mi partido, a través de decisiones que afectan los principios de certeza y legalidad”, reclamó Llergo.
Los representantes de PAN y PRD acusaron a Morena de tener un doble discurso, al criticar a las instituciones por usar fideicomisos e incluso desapareciéndolos, argumentando que eran fuentes de de corrupción.
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