- Con récords de sequía en el primer trimestre del año, Los Ángeles se encuentra por primera vez en la fase tres de su plan de contingencia.
STAFF / LUCES DEL SIGLO
CALIFORNIA, EU.- Autoridades en Los Ángeles, California, patrullan a diario las calles para vigilar y atender quejas de desperdicio de agua cuando el estado y la región oeste de Estados Unidos desde hace años atraviesan una dura sequía.
Damon Ayala, especialista en conservación, forma parte del equipo del Departamento de Agua y Energía que fiscaliza las centenas de denuncias que reciben semanalmente de la comunidad sobre despilfarro de agua.
Ayala patrulla a diario las calles de Los Ángeles vigilando las banquetas. Cuando ve un charco se detiene.
“No es una situación extrema. Puede ser una rotura en el sistema de irrigación. Aquí hay evidencia de irrigación (fuera del horario)”, dijo mientras señalaba un charco en una banqueta poco después de las 10:00 horas, con el sol californiano ardiendo sobre la ciudad, donde está prohibido regar las plantas entre las 09:00 y las 16:00 horas.
Con récords de sequía en el primer trimestre del año, la ciudad se encuentra por primera vez en la fase tres de su plan de contingencia que ordena una advertencia ante la primera infracción. La multa para reincidentes va de 200 a 600 dólares, publicó la agencia AFP.
“Esto los orientará a actuar y a corregir cosas de las cuales quizás ni siquiera estaban conscientes”, aseveró Ayala.
“No vamos detrás del dinero, eso no nos va a traer más agua. Lo que estamos haciendo es tratar de cambiar el comportamiento”.
A la quinta infracción se instala un dispositivo que restringe el suministro, un recurso que de acuerdo con Ayala rara vez ha sido necesario.
“Hemos atravesado duras sequías en el pasado y los angelinos han respondido, y esperamos que lo hagan de nuevo”, señaló.
Con embalses y ríos alcanzando mínimos históricos, las autoridades aumentaron las restricciones, limitando a no más de 15 minutos de riego para los jardines dos días a la semana.
Famosa por sus infinitas hileras de palmeras, Los Ángeles también se caracteriza por el verdor de sus céspedes en barrios residenciales, donde los rociadores se disparan automáticamente.
Pero a medida que la sequía se agudiza, el paisajismo de la ciudad vive una pequeña transformación con algunos vecinos reemplazando sus céspedes por plantas nativas de esta región desértica.
El Departamento de Agua y Energía parece comenzar a ver resultados. Las autoridades observaron en junio una reducción de la demanda de agua residencial comparado con el mismo mes en 2021.
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