NIDO DE VÍBORAS

2368
NIDO MARA-EDUCACIÓN

Por KUKULKÁN

A LA EDAD de 18 años los jóvenes quintanarroenses tienen muy pocas oportunidades y posibilidades para desarrollarse plenamente; el primer obstáculo que enfrentan es la insuficiencia de escuelas y el campo laboral se limita básicamente al sector servicios por ser el turismo la piedra angular de la economía del estado. Sus opciones son: irse a otras universidades del país, dependiendo de las condiciones económicas de cada familia; quienes se quedan deben luchar por alcanzar un lugar en alguno de los centros de educación superior, públicos o privados, en operación y al concluir es difícil ejercer fuera de la industria turística o la burocracia.

LAS CIFRAS oficiales sobre el número de escuelas que hay por cada nivel educativo en Quintana Roo, gráficamente forman una especie de embudo que cierra toda posibilidad para que los jóvenes estudien una carrera completa y mucho menos un trabajo estable y bien remunerado: El contraste es diametral: para el nivel básico existen en total mil 227 escuelas de educación, sólo 58 para media superior y apenas 22 centros educativos de nivel superior. A esto hay que agregarle que muy pocas de ellas cuentan con instalaciones óptimas para garantizar a las nuevas generaciones una educación de calidad integral con actividades artísticas y deportivas.

Y SI A TODO esto se suma el camino tortuoso que deben emprender alumnos, padres de familia y maestros de universidades públicas para ser escuchados por las autoridades estatales en sus demandas de mejoras a las instalaciones, conseguir recursos y esperar a que se apliquen adecuadamente, que no se fuguen para otro lado, y evitar ser otra vez víctimas de promesas políticas. Hace cinco meses, al cierre del gobierno de Carlos Joaquín González, los estudiantes de la Universidad Autónoma de Quintana Roo, Unidad Académica de Cancún, esperaban que les cumpliera con la obra del centro deportivo universitario pues había presupuesto etiquetado para concretarlo, pero no fue así.

AL ASUMIR la nueva administración de Mara Lezama Espinosa los trabajos llevaban un 30 por ciento de avance físico de la obra a pesar de que debía concluirse desde septiembre pasado. Al hacer una evaluación del proyecto se encontraron irregularidades de la pasada administración y la instrucción que recibió el director del Instituto de Infraestructura Física Educativa, José Rafael Lara Díaz, fue que ninguna de las obras que se dejaron inconclusas pero que contribuyen a garantizar la educación, puede esperar y se deben concluir como estaban proyectadas porque la afectación no sólo es en dinero sino en la calidad académica, impactando en el bienestar social de las personas.

LA RESPUESTA fue inmediata y el pasado martes la gobernadora acudió a la inauguración y entrega de las nuevas instalaciones, en presencia de alumnos, profesores y autoridades universitarias lo cual aprovechó en su discurso para marcar la diferencia de su gobierno con los anteriores: ‘Es fundamental hacer infraestructura bien hecha, sobre todo transparentando los recursos, pero en esta ocasión hablar de este espacio deportivo, las y los alumnos podrán tener espacios de recreación, espacios de deporte, poder competir entre ellos y entre otras escuelas, siempre es una luz de esperanza y sobre todo arrancárselos a la delincuencia con espacios culturales y deportivos’, celebró.

@Nido_DeViboras