- Sasha Sokol dijo que el productor musical practicó grooming, término que se utiliza para referirse a prácticas utilizadas para acercarse a menores.
STAFF / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- Si Luis de Llano pudo tener una relación con Sasha Sokol cuando ella era adolescente y evadir durante décadas la responsabilidad por el abuso de poder, se debió en parte a que él trazó una estrategia para normalizar los hechos y hacerla sentir responsable, consideró la cantante.
En entrevista con el diario El País, la integrante de Timbiriche dijo que el productor musical practicó grooming, término que se utiliza para referirse a prácticas utilizadas para acercarse a menores, hacerlos sentirse seguros y posteriormente abusar de ellos.
“Luis pudo llegar hasta donde llegó porque tenía mi confianza y la del núcleo cercano, incluida mi familia. Manipuló y disfrazó de afecto su abuso”, dijo.
Sasha agregó que por mucho tiempo no la vio la relación, ocurrida cuando De Llano tenía 39 años y ella 14, como un ejemplo de conducta asimétrica, pues se había sentido honrada de que él le pusiera atención. Recordó incluso que cuando otras personas se enteraban sobre lo sucedido, la persona que solía ser juzgada era ella.
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“Yo oía a la gente cuchicheando sobre mí, en cambio, nunca oí a nadie que lo cuestionara a él. Esto reforzaba la idea de que yo era la culpable”, expresó.
El 6 de marzo de 2022, dos días antes de denunciar abuso en redes sociales, la cantante vio un fragmento de la entrevista que el productor musical tuvo con Yordi Rosado, en la que De Llano minimizaba los abusos. Esto, dijo, la hizo repensar la situación y decidirse a alzar la voz.
“Durante nueve horas analicé todas las posibilidades hasta que dije: ‘Cuando tenía 14, 15 o 16 años no tenía las herramientas para defenderme. Pero ahora que me doy cuenta de lo que pasó, no podría verme a mí misma en el espejo si no lo nombro’. Al poner un límite, no se lo puse a Luis, me lo puse a mí misma, porque cada vez que él hablaba de mí, me revictimizaba”.
Agregó que leer “El Consentimiento”, libro que escribió la francesa Vanessa Springora sobre el abuso que vivió a manos del escritor Gabriel Matzneff, también le ha ayudado a identificar los hechos como abuso.
Sobre las consecuencias que ha enfrentado De Llano el último año, incluyendo una condena por daño moral que le obligará a pagar una indemnización y pedir una disculpa, Sasha consideró que son positivas, pero que no marcan el final del camino que ella tiene por recorrer.
“Por primera vez se estabiliza la verdad, por primera vez el juicio público cae en él. Pero el proceso legal es sólo una parte, mi trabajo personal continúa”, dijo.
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