- Se habla de una baja en el costo de las concesiones que llegaron a tener un valor arriba de 500 mil pesos, y a la fecha oscilan entre 200 y 220 mil pesos.
EUGENIO PACHECO
CHETUMAL, Q. ROO.- Al interior del sindicato de taxistas de Chetumal (Suchaa) crece la incertidumbre laboral ante la entrada formal de Uber y otras plataformas digitales de transporte, y muchos de los choferes comienzan a buscar nuevas oportunidades.
Los altos costos de los combustibles, refacciones y otros insumos para los vehículos son factores extra que alejan a los operadores de sus actuales labores.
El anuncio de no liberarse en el corto plazo algunas concesiones desde el gobierno, hace que los socios operadores abandonen su actividad, a pesar de estar en los primeros lugares de la lista de espera, comentan algunos delegados.
Los delegados del sindicato aseguran que, en sus rondas por las calles de Chetumal, han detectado que muchos taxis pasan horas en domicilios particulares, lo que muestra la carencia de choferes para los vehículos y comienza a sentir la falta de este tipo de transporte en las calles.
El fenómeno, aunque se niega desde los integrantes de la dirigencia del sindicato, es evidente y en las redes sociales es recurrente la falta de vehículos de alquiler, tanto en las calles en la modalidad de ruleteo, como en el servicio de radiotaxi que se solicita por teléfono o por la mensajería de WhatsApp.
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Por ejemplo, una familia en las inmediaciones de la popular colonia Del bosque, sufrió más de 40 minutos por la falta de taxis circulando en la ciudad, y quienes laboran continúan condicionando el servicio por un precio por encima y fuera de las tarifas establecidas.
Desde las 10:00 de la mañana en los diferentes números telefónicos habilitados por los grupos que prestan el servicio de radiotaxi, al menos cuatro de ellos por más de una hora se dijeron imposibilitados de enviar el vehículo solicitado, al no contar con unidades disponibles.
Los operadores hablan de bajas masivas para buscar una oportunidad en la nueva modalidad de transporte de pasajeros, como Pedro, que aseguró que como muchos otros han dejado de pagar sus cuotas semanales, esto último se pudo constatar con la casi nula afluencia en las ventanillas donde se cobran los 50 pesos semanales que deben cubrir para poder laborar en un taxi.
Además, se habla de una baja en el costo de las concesiones que llegaron a tener un valor arriba de 500 mil pesos, y a la fecha oscilan entre 200 y 220 mil pesos, por lo que no descartan se presente también un remate masivo de las placas o concesiones.
Juan Diego Polanco, integrante de la directiva del Suchaa, se negó a dar una declaración sobre la situación que se vive con los taxistas en la capital del estado.
