Por KUKULKÁN
EN LA LEYENDA política urbana de Quintana Roo corren versiones de que quienes hicieron ‘moloch’ (‘juntarse’ en maya) para meterle al cochinito y contratar un empresa especializada en guerra sucia contra los adversarios políticos que representen un obstáculo para sus aspiraciones a gobernar los codiciados municipios del norte de la entidad, son el líder del Congreso estatal Renán Sánchez Tajonar, el diputado federal Juan Carrillo Soberanis y el titular de la Secretaría del Bienestar Pablo Bustamante Beltrán, quienes durante las elecciones de 2024 aspiran a gobernar o controlar los municipios de Cozumel, Isla Mujeres y Benito Juárez, respectivamente.
CIERTO o falso, es un hecho que desde inicio de año arreciaron las campañas mediáticas de desprestigio contra quienes actualmente gobiernan y buscan reelegirse en el cargo o contra quienes tienen fuertes posibilidades de obtener la candidatura y ganar. Por ejemplo, en Cozumel el también líder estatal del Partido Verde Ecologista, Sánchez Tajonar pretende romper el acuerdo previo con Morena para apoyar la reelección de la alcaldesa cozumeleña Juanita Alonzo Marrufo y esperar turno hasta 2027. El fuego amigo no ha cesado en su contra con acusaciones falsas o inexactas que exaltan, eso sí imperdonable, sus errores en la forma de gobernar la isla de las golondrinas.
DEFENSORA de las mujeres, Mara Lezama Espinosa ha mostrado indirectamente su inconformidad con estas actitudes ‘machistas’ que todavía prevalecen en la política local, por ejemplo el día del magno evento de la sesión solemne de la XVII Legislatura para entregar la presea a Ramón Bravo, celebrado en la isla, el organizador del evento (léase protagonista), Sánchez Tajonar casi secuestró a sus compañeros legisladores para concentrarse en un lugar a donde supuestamente recibirían a la gobernadora para de ahí trasladarse al evento, mientras que por otro lado la alcaldesa Juanita Alonso aguardaba en su casa con un nutrido grupo de mujeres la llegada de la mandataria.
FUERON minutos de suspenso entre los equipos de ambos lados que inclusive llevaron a algunos a jugar apuestas para ver quién de los dos personajes tenía la razón. Y como era de esperarse el protocolo oficial, Mara Lezama llegó directamente al domicilio de la anfitriona quien, en represalia, ya durante el discurso fue ignorada por el organizador del evento no sólo omitiendo mencionarla por su nombre sino haciendo como que no existía. Igual pasa en Isla Mujeres donde su alcaldesa Atenea Gómez Ricalde ha enfrentado los embates mediáticos de su acérrimo adversario Juan Carrillo, quien desde el Palacio Legislativo de San Lázaro ha promovido bombas mediáticas escandalosas para desprestigiar a su sucesora que hasta el momento han resultado infructuosas.
AL DIPUTADO federal le urge que Atenea no se reelija porque continuarán vigentes las 19 denuncias emprendidas en su contra por los delitos de peculado, malversación de fondos, ejercicio indebido de la función pública y lo que resulte por un faltante de 250 millones de pesos de recursos públicos cuando gobernó la isla por dos periodos. Entre las irregularidades encontradas hay pruebas de obras no ejecutadas, aplicación de sobreprecios a productos y servicios, pagos para cursos de capacitaciones no realizados y la desaparición de las cuotas retenidas a los trabajadores por concepto de ISSSTE y Fonacot, además de esfumar las recaudaciones provenientes de pagos por derechos de usufructo de la Zona Federal Marítimo Terrestre (no ingresadas durante cinco años a las arcas municipales). En un año Juan Carrillo dejará la curul, se le acabará el fuero y no se le ve más futuro político que el prenderle fuego a Roma mientras él, como Nerón, se pone a tocar la lira.
LA DISPUTA por la silla municipal de Benito Juárez, con cabecera en Cancún, tiene una carga de simbolismo político recientemente adquirido y por eso es la más codiciada: no sólo se pelea electoralmente por conquistar el municipio más próspero del estado, con el primer destino turístico de Latinoamérica, sino su calidad de trampolín para saltar a la gubernatura del estado en 2027 luego de que en 2022 Mara Lezama inaugurara esa vía directa sin escala por diputaciones federales y senadurías a la vieja usanza. Entre quienes tienen oportunidades reales de conquistar la candidatura con el partido de moda, Morena, es la diputada federal Anahí González Hernández igualmente víctima de guerra sucia por parte de su adversario verde, Pablo Bustamante, cuyos operadores mediáticos soltaron el falso rumor de que ‘por malos resultados’ la habían bajado de la coordinación estatal de apoyo ciudadano para Claudia Sheinbaum. Pero este fin de semana, en calidad de coordinadora, Anahí encabezó la asamblea de arranque para la promoción en el estado del proyecto político de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México.
