Por KUKULKÁN
AL MENOS 27 mil obreros, volqueteros, operadores de maquinaria han cumplido con creces su labor en el Tramo 2 del Tren Maya, al grado que la Secretaría de la Defensa Nacional ha anunciado con bombo y platillo la conclusión al 100 por ciento de los trabajos en ese tramo de la magna obra del gobierno de México.
DE NOCHE y de día, bajo los rayos del sol, con lluvia y con toda la humedad que uno se pueda imaginar, ese ejército de trabajadores ha hecho realidad la creación de cinco estaciones ubicadas en el estado de Campeche a lo largo de 234 kilómetros: Carrillo Puerto-Champotón, Edzná, San Francisco Campeche, Tenabo y Hecelchakán.
A LA PAR han logrado construir en esa región de la Península de Yucatán cinco viaductos concluidos, 49 pasos vehiculares, peatonales y de fauna, así como 325 obras de drenaje transversal. Pero ellos no quisieran dar por concluida su faena. No es para menos, el magnate mexicano, el ingeniero Carlos Slim, a través de Grupo Carso, en cuanto ganó la licitación para construir ese tramo del Tren Maya, tomó la decisión de asegurar a todos y cada uno de esos 27 mil trabajadores al Instituto Mexicano del Seguro Social.
TAMBIÉN el Fondo Nacional de Fomento al Turismo presume que en ese tramo del proyecto Tren Maya los trabajadores hayan estado asegurados por lo que hasta los dirigentes de las Confederaciones de Trabajadores de México y de la Construcción, explicaron que esos números son referentes a los empleos directos e indirectos, generados por la obra.
LOS RESULTADOS son favorables, pues “era necesario hacer algo con los dos años de pandemia en el mundo, y donde México como país, tuvo afectaciones severas en materia económica y social, por ello el alcance del empleo para la obra ayudó a ese sector de la población que sólo ganaba un salario mínimo con trabajos informales, a que tuvieran algo más sólido hace dos años”.
EL CONTRATO colectivo con la empresa Carso, ganadora de la licitación del tramo dos que comprende de Escárcega a Calkiní, refiere los beneficios a los obreros, toda vez que además de los salarios a manejarse y algunos privilegios laborales, “esto ayuda directamente a nuestros agremiados, y a los de otros sindicatos, debido a la magnitud de la obra sabíamos que no podíamos cubrir la necesidad de mano de obra, y le dieron cabida a otros sindicatos como el de la CTC (Trabajo de la Confederación de Trabajadores de la Construcción), pero además, se convocó a obreros para ingresar bajo las siglas de la CTM, para que no estuvieran desprotegidos”.
LA MEJORA para los trabajadores que se han visto ampliamente privilegiados alcanza las posibilidades financieras reales para hacerse de una vivienda con el fruto de su labor, ya que el salario alcanzado en algunos casos generó los puntos necesarios para un crédito del Infonavit de manera rápida. La gran interrogante, es saber qué pasará con todo este ejército de trabajadores cuando se acabe la obra, cómo le hará el gobierno de la Cuarta Transformación para mantener esta inercia laboral.
