Mauricio Roldán Parra, quien inició su trayectoria profesional como capturista con estudios de contabilidad truncos, escaló a una posición de alto nivel en el IMSS.
STAFF / LUCES DEL SIGLO
CIUDAD DE MÉXICO.- Mauricio Roldán Parra, quien inició su trayectoria profesional como capturista con estudios de contabilidad truncos, escaló a una posición de alto nivel en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Guerrero, a pesar de no cumplir con los requisitos establecidos para ocupar el puesto. Roldán Parra asumió como encargado de despacho del IMSS en Guerrero entre enero y abril de 2024, según registros oficiales y publicaciones en redes sociales como las de Coparmex.
Con apenas seis años de experiencia como capturista, Mauricio Roldán ingresó al IMSS en 2006 como Coordinador de Programas dentro de la Coordinación de Control y Abasto. Posteriormente, entre junio de 2017 y mayo de 2023, desempeñó funciones como Jefe de Servicios Administrativos del IMSS en Guerrero, según declaraciones del propio funcionario.
El concurso de oposición para ocupar una titularidad en los Órganos de Operación Administrativa Desconcentrada del IMSS exige que los aspirantes posean un título profesional en Medicina o Enfermería, una especialidad acreditada, y estudios avanzados en Administración de Servicios de Salud, además de cinco años de experiencia directiva en el sector salud. Sin embargo, Roldán no cumple con estos requisitos, ya que no concluyó la preparatoria, hecho que pone en entredicho su designación.
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Roldán ascendió dentro del IMSS durante la administración de Mikel Arriola, expresidente de la Liga MX, quien actualmente enfrenta acusaciones por presunta corrupción y vínculos con Televisa en un esquema de sobornos para obtener derechos de transmisión de Copas del Mundo. Este contexto refuerza las críticas sobre la falta de transparencia en los nombramientos dentro del IMSS.
Un análisis de Computrabajo indica que el salario promedio de un capturista de datos en México oscila entre 6,700 y 7,000 pesos mensuales. En contraste, como Jefe de Servicios Administrativos en el IMSS, Roldán percibe un salario neto anual de 884,544 pesos, además de un aguinaldo de más de 128,000 pesos y un fondo de ahorro superior a 31,000 pesos. Según la Plataforma Nacional de Transparencia, su ingreso mensual bruto entre julio y septiembre de 2024 fue de 98,041 pesos.
A pesar de sus ingresos declarados, informes internos cuestionan el estilo de vida de Roldán, que incluiría viajes al extranjero y propiedades de alto valor en Guerrero. Según los registros, posee un Chevrolet Cruze modelo 2010 y adeudos en tarjetas de crédito que suman 127,000 pesos. Estas discrepancias han generado sospechas sobre el origen de sus recursos.
El historial legal de Roldán también genera controversia. Incluye denuncias por delitos del fuero común contra mujeres y demandas en Juzgados Familiares presentadas por Karla Paola Solórzano López y Virginia Patricia Martínez Guerrero. Además, se ha amparado en dos ocasiones: contra el Director del Centro de Sanciones Administrativas de la Ciudad de México y contra el titular del Área de Responsabilidades del Órgano Interno de Control del IMSS.
Testimonios cercanos al IMSS señalan que Roldán mantiene vínculos con Javier Guerrero García, Director de Operación y Evaluación del Instituto, quien ha ocupado diversos cargos en la administración pública desde los años 90. Asimismo, se le relaciona con Efraín Arizmendi Uribe, Jefe de la Unidad de Atención Médica, ambos señalados mediáticamente por supuestamente priorizar intereses personales en sus gestiones.
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