- Melania tiene un alto gusto por la ropa de diseñador, pero las posturas controvertidas de su esposo han impactado su guardarropa.
STAFF / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- Hoy, durante la toma de posesión de Donald Trump como Presidente de los Estados Unidos de América por segunda vez, no todos los ojos estarán sobre el magnate, sino que también robarán atención su esposa Melania y la ropa que elegirá.
Aunque la moda de la Primera Dama parezca un tema menor, especialistas señalan que los atuendos tienen una fuerte carga simbólica que revela incluso la relación que la pareja tiene con el mundo y sus políticas.
“Hay una cualidad aspiracional en Melania: los votantes de Trump, creo, la ven como una mujer perfecta e ideal, y ella tiene cierta presión para proyectar esa imagen”, dijo a USA Today Kate Andersen Brower, autora del libro “First Women”.

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Como ex modelo, Melania tiene un alto gusto por la ropa de diseñador, pero las posturas controvertidas de su esposo han impactado su guardarropa.
Tanto que en 2017, año en que inició de Trump, múltiples diseñadores rechazaron abiertamente que sus prendas fueran usadas por la entrante Primera Dama.
La francesa Sophie Theallet incluso escribió en 2016 una carta abierta donde invitaba a otros diseñadores a no tener relación con la esposa del hombre que, dijo, llegó al por con una campaña racista, xenofóbica y sexista.
Entre los rechazos abiertos que tuvo se incluyen los de Marc Jacobs, Tom Ford, Phillip Lim y Christian Siriano.
Este último remarcó que, como un hombre gay, no apoyaría una campaña política que prometía que no tendría los mismos derechos que otros.
“La industria de la moda no acoge muy bien a Melania, no es ningún secreto. Algunos son muy de mente abierta y serían capaces de hacer algo especial. Pero mucha gente no lo es”, dijo a WWD, Women’s Wear Daily, Hervé Pierre, el estilista y diseñador de Melania.
La posición parece no haber cambiado desde 2017, cuando la mujer, ahora de 54 años, realizó su primera aparición como Primera Dama, vestida de Ralph Lauren, en un atuendo azul que recordaba al estilo de Jackie Kennedy.
Hace poco, CNN preguntó a diseñadores estadounidenses, incluidos Carolina Herrera, Michael Kors, Tom Ford y Hearst, si vestirían a Melania, pero no respondieron; incluso Ralph Lauren no ofreció una postura.
Igualmente, Women’s Wear Daily buscó a 16 diseñadores y obtuvo el mismo resultado.
Ante la antipatía que encuentra en cierta parte de Estados Unidos, la mujer nacida en Eslovenia viste, casi en su totalidad, creaciones de diseñadores extranjeros.
Todo ello en un momento donde se discuten políticas económicas y la posibilidad de aumentar impuestos para apoyar su industria nacional.
Las casas europeas Dior y Versace han ofrecido prendas a la Primera Dama, de acuerdo a Toni Holt Kramer, fundador del grupo de apoyo del nuevamente Presidente, The Trumpettes.
Melania tuvo su regreso a las apariciones políticas de su esposo en la convención republicana de julio de 2024, cuando usó un traje Dior, diseñador del vestido que usó en su boda el 22 de enero de 2005.
En los meses siguientes, sus prendas fueron de Dolce & Gabbana, Gucci, Giorgio Armani, Versace y Valentino.
La decisión contrasta con la tradición de Michelle Obama, quien acostumbraba portar prendas de talentos emergentes, como Jason Wu, Fe Noel e Isabel Toledo.
“Le guste o no (a Melania), tiene una responsabilidad, y es representar al electorado que lo eligió (a su esposo)”, criticó la diseñadora Nina McLemore, quien ha vestido a Hillary Clinton.
El guardarropa de la Primera Dama durante los próximos cuatro años ha sido fuente de especulación, pero especialistas incluso creen que podría no ser tan grande.
Se prevé que Melania, quien hace unos meses lanzó su libro de memorias, sea poco activa en actos públicos y se aparte del ojo mediático.
CREADOR ALIADO
Ser estilista y diseñador de Melania Trump fue lo que despertó atención en Hervé Pierre, quien desarrolló su carrera en talleres. El francoestadounidense fue asistente del diseñador Erik Mortensen, trabajó con Oscar de la Renta, Vera Wang y Bill Blass y llegó a ser director creativo de Carolina Herrera.
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