CONTRASTANDO IDEAS

2030
  • La clase política mexicana sufre una grave crisis de liderazgo, incongruencia ideológica y desconfianza ciudadana.
DR. JULIO JIMÉNEZ MARTÍNEZ

En el contexto del histórico proceso electoral 2021, la crisis de liderazgo y la incongruencia ideológica de los líderes de los partidos políticos en México, fomenta la poca credibilidad y desconfianza electoral de los ciudadanos en la clase política nacional, sin embargo la falta de auténticos liderazgos y la inexistencia de propuestas que en verdad resuelvan las demandas ciudadanas, son producto de la ignorancia, incapacidad, indiferencia y arrogancia de la mayoría de la clase política que evita la consolidación del proceso democrático en México.

Desafortunadamente, para los mexicanos las cosas no son como se esperaban; ya que con la llegada del gobierno de MORENA, se destruyeron importantes proyectos que afectaron seriamente el crecimiento económico nacional, cabe mencionar, que los partidos antagónicos a la 4T, no han entendido como elaborar una estrategia político-electoral que genere el voto de confianza y la reconciliación ciudadana; circunstancia que se explica con la profunda crisis de identidad política y congruencia ideológica que fomentan la desconfianza ciudadana y el desprestigio político-electoral; producto de los abusos, excesos y graves omisiones en materia económica, política, jurídica y electoral en perjuicio del pueblo de México.

Motivos que han llevado a diversos ex funcionarios, ex legisladores y ex gobernantes a ser denunciados por la comisión de múltiples delitos vinculados con la delincuencia organizada, narcotráfico, lavado de dinero, trata de personas, tráfico de armas, enriquecimiento ilícito y delitos electorales, entre otros.

Circunstancia que fortalece los acuerdos inconfesables de los líderes partidistas asignando candidaturas a sus parejas sentimentales, familiares, amigos, compromisos políticos (pago de cuotas o cuates) o simplemente nombrando candidatos a personajes que no representan nada, ni a nadie, ya que por ser famosos ex deportistas (boxeadores, futbolistas, luchadores), artistas, modelos, líderes sindicales, o empresarios, son personajes sin la más mínima experiencia política y capacidad profesional para representar los derechos de los ciudadanos desde la trinchera legislativa y por si fuera poco, las candidaturas plurinominales las acaparan los líderes de los partidos políticos para el pago de sus compromisos personales o políticos, por eso en cada legislatura tenemos diputados que usan la curul para dormir, hacer negocios personales, o en el peor de los casos a cobrar una dieta por no hacer nada

Claro, obedecer con lealtad a ciegas y aprobar las ocurrencias o caprichos de su líder moral. Por otra parte, debemos reconocer que son muy pocos los auténticos legisladores con capacidad, trayectoria y experiencia legislativa para resolver y representar las causas ciudadanas. Esta clase de vicios dentro de la clase política no es exclusivo de los partidos de oposición, ya que en MORENA, se han hecho públicos múltiples casos de incongruencia ideológica o negociación política, que vulneran la paridad de género, la inclusión democrática, la participación ciudadana y la lealtad a la militancia partidista; por estas y otras muchas razones, los militantes, simpatizantes y ciudadanos en general, ya no confían en el discurso de los partidos políticos o mucho menos en la clase política, razón por la cual, ante la ausencia de auténticos liderazgos ciudadanos, la sed de justicia social y la desconfianza ciudadana, se han consolidado los discursos de odio.

Lo anterior ha sido usado inteligentemente por AMLO, ya que ha alimentando la frustración ciudadana, creando un sentimiento de venganza político-electoral, que sólo ha servido para dividir al pueblo de México, polarizando a los diversos grupos de la sociedad, usando expresiones como: los “FIFÍS vs CHAIROS” o “Conservadores vs. Liberales” o “Ricos Malos vs. Pobres Buenos” en pocas palabras en pleno proceso electoral, los mexicanos vivimos momentos de incertidumbre y profunda desconfianza de la clase política .

Sin embargo, debemos reconocer que para muchos personajes de la clase política que buscan la inmunidad que brinda el fuero constitucional o la impunidad que otorga el ejercicio del poder político, sufrirán una inevitable derrota electoral, producto de sus abusos, incongruencias, excesos y traiciones ciudadanas, por lo tanto, algunos tendrán las horas contadas al frente de la dirigencia nacional de sus partidos, que se han convertido en negocios de familia, circunstancia que les queda muy clara y por lo tanto, como buenos políticos mexicanos, han puesto en marcha estrategias de negociación o cabildeo político, buscando inmunidad o impunidad, autoasignándose una diputación plurinominal, considerando que ya no cuentan con la preferencia electoral y mucho menos con la confianza ciudadana de sus electores, por lo tanto nuestra clase política aplica la máxima de Maquiavelo: “El fin justifica los medios” y en pocas palabras; andan vendiendo favores o comprando apoyos políticos con familiares, amigos o compromisos de poderosos funcionarios o liderazgos políticos y empresariales.

Vale la pena reflexionar en relación a las polémicas circunstancias que afronta el gobierno de AMLO; ya que los constantes enfrentamientos con los medios de comunicación, las expresiones de indiferencia ante los reclamos de grupos feministas y defensores de los Derechos Humanos que exigen justicia y solución a los altos índices de violencia de género (feminicidios), el interminable debate con el INE, las descalificaciones y señalamientos en contra de jueces federales y miembros del Poder Judicial de la Federación, las descalificaciones a los grupos empresariales, la intolerancia a la sociedad civil que denuncia los múltiples actos de encubrimiento por presuntos delitos de carácter sexual, como el clásico “YA CHOLE”, la corrupción y simulación en materia sanitaria que sigue costando miles de vidas humanas y los millonarios caprichos del gobierno en las múltiples obras faraónicas que sólo estimulan el debate ciudadano y la polarización de la población

Fenómeno que no abona al estado de derecho y vulnera los Derechos Humanos, ya que destruye la posibilidad de recuperación económica del país; no brinda condiciones de seguridad y certeza jurídica a los inversionistas nacionales y extranjeros que han cancelado cientos de proyectos que representaban miles de empleos productivos que generarían millones de pesos en beneficio del país.

Por lo tanto, es fundamental para los mexicanos contar con instituciones fuertes que gocen de la autonomía e independencia como el Instituto Nacional Electoral INE, Instituto Nacional de Acceso a la Información INAI, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Comisión Nacional de los Derechos Humanos CNDH, instituciones que las integren funcionarios que más allá de ser beneficiarios de una inútil burocracia y una onerosa partidocracia, sean verdaderos servidores públicos, que en cuenten con la formación profesional, la experiencia personal y absoluta conciencia de lo que representa la independencia política y la autonomía partidista con la finalidad de garantizar una actuación imparcial de acuerdo a sus facultades y atribuciones constitucionales, que son pieza clave para garantizar la certeza jurídica y la imparcialidad electoral que demanda la democracia mexicana.