- La pequeña Alexandra Elizabeth superó el cáncer.
OMAR ROMERO
CANCÚN, Q. ROO.- Alexandra Elizabeth fue una de las pequeñas que recientemente tocó campana, pues se ha convertido en una sobreviviente del cáncer infantil y esto representa un logro para la familia tras haber superado una serie de tratamientos.
Cada 15 de febrero se conmemora el Día Internacional del Cáncer Infantil y tres menores y sus familias estuvieron en una sencilla pero emotiva ceremonia, donde se tocó la campana. Además, plasmaron sus huellas en un área del Hospital General Regional número 17 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Antonia Velázquez, madre de esta pequeña de 8 años, consideró al 14 de febrero como un momento especial, pues, tras siete años de que Alexandra fue diagnosticada con cáncer, finalmente el tratamiento dio sus resultados y es una sobreviviente, al sostener que en ningún momento perdieron la fe.
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“Eso me llena de alegría, de felicidad, porque es un logro que hemos trabajado años y años. Sentí que se me caía el mundo encima porque no es fácil asimilar que te den una noticia de que tu hija tiene un tumor que es maligno, pero estuvimos con la fe siempre positiva en que iba a salir todo bien, y así fue”.
Recordó que, en 2017, su hija presentó dolor de oído, de cabeza, fiebre y llanto, por ello, la llevó al médico, donde le diagnosticaron un tumor maligno e inició tratamiento en Mérida, sin embargo, ante la gravedad fue necesario trasladarse hasta la Ciudad de México.
Ahí la pequeña fue operada y posteriormente retornaron a Mérida, donde continuó con sus revisiones y una persona les habló sobre Fundación Aitana, dedicada a apoyar a niños con cáncer, en Cancún.
“Fuimos a buscar apoyos y ahí nos brindaron la ayuda, desde esa fecha nos apoyaron con boletos de camión de ida y regreso de Cancún a Mérida”, dijo la señora Antonia, quien después de que su hija tocó la campana, mencionó que disfrutarán de la vida, luego de estar años padeciendo esta enfermedad.
Reconoció que hubo momentos dónde se cuestionó las razones por las que su hija fue diagnosticada con cáncer, no obstante, aseguró que en ningún momento perdió la fe, pues sabía que el tratamiento daría resultados.
“A todos los papás que están en esta lucha que le echen ganas, que sí se puede, que sí vale la pena, al principio sientes que el mundo se va a acabar, porque vienen momentos difíciles, pero hay que tener fe que todo estará bien”.