- Personas con discapacidades visuales y auditivas disfrutaron una función especial del musical ‘El Rey León’ con luces tenues y sonidos suaves.
STAFF / AR
CIUDAD DE MÉXICO.- La aventura de El Rey León conquistó este domingo a chicos y grandes con su función especial “relajada”, para personas con discapacidades visuales y auditivas, en el Teatro Telcel.
Eli Nassau y Sergio Carranza, intérpretes de Timón y Pumba, respectivamente, aparecieron en el escenario a las 13:00 horas para adelantar cómo sería esta función especial, programada en el marco del Día Internacional de la Discapacidad, a celebrarse este 3 de diciembre.
“Los sonidos estarán suavizados, las luces parcialmente encendidas y hay kit sensoriales para quien lo necesite. Habrá voluntarios de la organización Iluminemos por el Autismo para ayudarlos en lo que requieran”, dijo Carranza. “Y no olviden que pueden expresarse con total libertad. Pueden aplaudir o usar el aplauso en lengua de señas”, agregó Nassau.
Así dio inicio el desfile de marionetas con un par de jirafas (actores con zancos) y un elefante gigante (manejado por cinco personas) que entró por las escaleras de las gradas para llegar al escenario, justo en “El Ciclo Vital”.
Un bailarín lucía su traje con tres venados, dando la sensación de movimiento; otros más daban vida a las cebras, mientras Zazú en marioneta, dirigida por Ariel Bonilla, arrancaba las risas de los presentes.
La audiencia, en su mayoría familias con niños, gozaba el ensamble de bailarines y las marionetas como esa manada de antílopes (montada en una bicicleta) o las jirafas que desde el escenario bajan su cuello y casi tocan al público.
Un niño con autismo bajaba por las escaleras para intentar subir al escenario, pero una voluntaria lo detenía y trataba de convencerlo, amablemente, de volver a su lugar. Otro pequeño lanzaba gritos de emoción al ver la estampida de ñus y la trampa mortal de Mufasa.
Los voluntarios tuvieron que estar muy al pendiente de cada detalle para ayudar a cualquier pequeño que lo necesitara. Y para advertirles a los padres cuando algún actor iba a descender por las escaleras. Todo corrió en orden y seguridad.
Entre cada canción, la gente agitaba las manos al aire, el aplauso en Lenguaje de Señas. Edgar Ibarra, el director musical, daba sus instrucciones desde la primera fila. Los tambores sonaban más suaves que en las funciones cotidianas.
Lo que no cambia es la emoción de la audiencia con canciones que han sido ya clásicos del filme de Disney: “Yo Quisiera Ya Ser el Rey”, “Hakuna Matata” o “Él Vive en Ti”, con un Rafiki interpretado por Nokulunga Madlala.
Tras las 2:40 horas que dura el show, el aplauso fue para todo el elenco, encabezado por Pierre Louis como Simba y Majo Domínguez como Nala.




