- Ernesto O’Farrill Santoscoy también es señalado por tener supuestas ligas con empresas facturadoras de operaciones simuladas (EFOS).
STAFF / LUCES DEL SIGLO
CIUDAD DE MÉXICO.- Una sólida carrera, así como credenciales para autonombrarse analista y consejero eran parte de la carta de presentación de Ernesto O’Farrill Santoscoy, un personaje que realizó varias acciones a inicio de los años 2020 que le costaron el control de la casa de bolsa Bursamétrica y lo dejaron mal parado en el ámbito financiero.
Ernesto O’Farrill Santoscoy, quien todavía se ostenta como presidente de Grupo Bursamétrica en redes sociales, no sólo incumplió con sus compromisos financieros, sino que optó por sistemas operativos que no generaron ganancias y que por el contrario eclipsaron su accionar como experto en la materia.
Se sabe que incluso su patrimonio y el de su familia se puso en riesgo, al poner en garantía la lujosa propiedad en la zona exclusiva de Santa Fe en la Ciudad de México, la cual se encuentra a nombre de su esposa, Lorena Amezcua Arango.
Ernesto O’Farrill Santoscoy también es señalado por tener supuestas ligas con empresas facturadoras de operaciones simuladas (EFOS), de las cuales al menos un par estaban confirmadas en el registro y listado del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
De acuerdo con información cotejada con las declaraciones fiscales del presidente del Bursamétrica las EFOS de las cuales habría recibido recursos son Optimización Dalga y Sófocles Servicios y Administración.
Sin embargo, hay al menos otras cuatro, las cuales si bien no aparecían de manera confirmada en las listas negras del SAT estaban en sospecha de ser apócrifas, siendo estas TSADEH, Yamelly, Administración de Negocios Alcántara y Corporativo Administrativo Empresarial del Bajío, de las cuales el ejecutivo habría declarado ingresos por concepto de sueldos y salarios.
Además, Ernesto O’Farrill Santoscoy habría tenido una incongruencia financiera significativa entre 2020 y 2021, luego de quede declarara una muy pequeña cantidad de ingresos, ni emitió facturas a clientes a su nombre.
En ese mismo periodo su esposa tampoco declaró ingresos, por lo que resultaba poco claro el cómo cotejaban sus gastos, entre los que debía sumarse algunos litigios.
Asimismo, como parte de sus obligaciones fiscales, Ernesto O’Farrill Santoscoy no realizó el pago definitivo mensual de IVA ni realizó su declaración anual de ISR para personas físicas en 2020.
Ernesto O’Farrill Santoscoy también presumía su relación con el otrora secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, y su círculo cercano.