- En promedio, la mitad del total de personas en México que busca financiar su automóvil son rechazados.
STAFF / AR
CIUDAD DE MÉXICO.- En promedio, la mitad del total de personas en México que busca financiar su automóvil son rechazados debido principalmente a la situación financiera de las personas y su capacidad de pago, además del encarecimiento de los automóviles registrado después de la pandemia.
“En muchos casos, a las personas no les da para pagar una mensualidad del auto. A veces la única alternativa es encontrar una unidad que se pueda ajustar a la situación del usuario, como son autos seminuevos o algunos modelos que han llegado al País de nuevas marcas a precios más accesibles”, afirmó Gustavo Higuera, director comercial de MStar.
En entrevista, el experto en financiamiento destacó que actualmente es más difícil acceder a un vehículo debido a que los precios han incrementado exponencialmente en los últimos veinte años, aunque con mayor velocidad a partir de 2022.
Según datos de la consultora JD Power México, el precio promedio de un auto en 2005 era de 161 mil pesos, mientras que para este año el promedio ya alcanza los 535 mil pesos, es decir, 232 por ciento más.
Los incrementos más drásticos de precios fueron en 2023 con respecto a 2022, pues en los años inmediatamente posteriores a la pandemia se vieron afectadas las cadenas de suministro.
Además, la disponibilidad de algunos componentes vehiculares provocó escasez de unidades y un alza de precios más acelerada.
Higuera resalta que los incrementos salariales en México no han crecido a la misma velocidad que los precios de los automóviles, lo que impide a las personas acceder a créditos más altos.
Por ejemplo, en 2005 el salario mínimo promedio era de 76.56 pesos diarios, mientras que para este año es de 208.20 pesos diarios, es decir, un 172 por ciento de incremento, según datos de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social.
No obstante, reconoce, la entrada al mercado de marcas de autos de origen chino está permitiendo que más personas accedan a tener su primer auto o incluso mudarse de categoría, al pasar de un auto compacto a una SUV, por ejemplo. Insiste en que acceder a un crédito hoy es más difícil para la gran mayoría de la población, especialmente después de la pandemia de Covid-19, cuando, muchos mexicanos tuvieron algún impago que pudo haber afectado su historial en el buró de crédito.
“Es responsabilidad de las instituciones financieras hacer una investigación más allá del buró, más profunda, y descubrir a gente que puede ganar y gastar mucho más de lo que dice el buró porque a veces hay ingresos informales. A muchos jugadores grandes no les interesa financiara estos clientes, a los que tienen mal historial crediticio, pero la bigdata hoy nos permite tener mejores perfiles y predecir un poco mejor”, expuso Higuera.