- El telón se levanta en el Olímpico de Helsinki para un encuentro del Grupo G cuando Finlandia reciba a Lituania.
STAFF / LUCES DEL SIGLO
CANCÚN, Q. ROO.- Vuelven a latir con la intensidad de las eliminatorias en Europa rumbo al Mundial 2026. Este jueves la agenda ofrecerá ocho duelos que pueden mover de forma sensible la tabla en cuatro distintos grupos.
La consigna es clara: sumar, porque ya viene la recta que separa candidatos de rezagados.
La fecha se reparte así: Finlandia frente a Lituania (Helsinki), Austria contra San Marino (Viena), Bielorrusia se mide ante Dinamarca (sede neutral: Zalaegerszeg, Hungría), Chipre visitará a Bosnia y Herzegovina (Lárnaca), Chequia enfrenta a Croacia (Praga), Islas Feroe ante Montenegro (Tórshavn), Malta vs. Países Bajos (Ta’ Qali) y Escocia ante Grecia (Glasgow).
El telón se levanta en el Olímpico de Helsinki para un encuentro del Grupo G cuando Finlandia reciba a Lituania en un choque de supervivencia para los locales en una llave dominada por neerlandeses y polacos. El margen de error es mínimo: ganar en casa es mandato si no quieren descolgarse antes de tiempo.
Más tarde, en Ta’ Qali, Malta intentará resistir a la marea naranja de Países Bajos; pese al episodio del pasaporte robado que retrasó el arribo de Memphis Depay al campamento, el favoritismo sigue pintado de naranja y obligará a Ronald Koeman a ajustar su frente de ataque sin distracciones.
En el Grupo C Bielorrusia hará de local administrativo ante Dinamarca en Zalaegerszeg; los daneses, con oficio y plantel profundo, no pueden regalar puntos si pretenden amarrar cuanto antes la cima de una llave cerrada. Ya por la noche, Escocia y Grecia convierten Hampden Park de Glasgow en caldera en un duelo directo por los primeros lugares del grupo. Los de Steve Clarke necesitan validar su buen arranque ante un rival que no especula fuera de casa y que sabe morder cuando el contexto lo exige. Por ambiente y consecuencias, es uno de los partidos del día.
Austria mira a San Marino con la serenidad en el Grupo H de quien sabe que “hacer la tarea” sin titubeos también suma. En Viena, el libreto apunta a control, presión alta y gol temprano para evitar sobresaltos. Más al sureste, Chipre recibe a Bosnia y Herzegovina en Lárnaca en un choque con aroma a final para los locales: puntuar es imprescindible para seguir con vida. De ese resultado puede desprenderse, incluso, un reacomodo en la pelea por los puestos de repechaje.
El menú de lujo aparece en el Grupo L con Chequia vs. Croacia en Praga, un choque de colíderes que enfrenta la contundencia balcánica con la disciplina checa. Partido de detalles: transición defensiva y pelota parada pueden dictar sentencia en un duelo que promete tensión de eliminatoria. Completa la función Islas Feroe contra Montenegro, un viaje incómodo para los visitantes —por clima y desplazamiento— y vital para ambos en la puja por escalones de clasificación.