Por KUKULKÁN
A ESTE espacio periodístico hizo llegar su derecho de réplica el asistente legal Héctor Raymundo González Velázquez, a quien se atribuye haber participado en una extorsión de un asunto penal cuyo expediente fue modificado para liberar al principal implicado, todo supuestamente con el conocimiento de los magistrados Carlos Lima Carvajal y el presidente Heyden Cebada Rivas. Cuando esta versión escandalizó al interior del Tribunal Superior de Justicia de Quintana Roo, la operación se cayó y se aplicó la ley, pero contra chivos expiatorios.
FUENTES al interior del Poder Judicial revelaron a Kukulkan que el viejo colaborador del magistrado Lima Carvajal fue el operador del monto de la extorsión por instrucciones superiores. Pero en su réplica, sin presentar pruebas, el funcionario judicial dice que todo es falso y que durante el tiempo que lleva trabajando como asistente legal dentro del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Quintana Roo, se ha conducido dentro ‘del marco legal para el adecuado desempeño de sus funciones y responsabilidades, bajo los principios de legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad y eficiencia’.
CITA: Con relación a los hechos a que se hace referencia en la publicación referida, específicamente por lo que hace a mi persona, es importante aclarar que se niega categóricamente todos y cada uno de ellos, toda vez que nunca he participado en la relación de actos ilícitos o de cualquier otra naturaleza similares o coincidentes con los descritos. Que no existe algún tipo de investigación, imputación o señalamiento hacia mi persona respecto a actos de corrupción y extorsión, menos aún vinculados a la persona y a la familia a que se hace referencia.
Y AGREGA: Que no conozco, ni he tenido algún tipo de acercamiento o comunicación con la familia y persona vinculada con el hecho con apariencia de delito de índole sexual, así como tampoco resulta verdad que el suscrito haya acudido en algún momento a las instalaciones de la cárcel pública en los términos que se señala. De modo que lo referido, constituye un evidente ataque a la moral y vida privada, lo que lesiona mis derechos, ya que no tiene sustento legal alguno y son totalmente falsos. Por lo mismo solicita que todos los datos y hechos asentados constituyen una simple apreciación del autor del texto periodístico, por lo que no constituye una verdad probada, sin guardar relación con información oficial recabada.
TIENE toda la razón Raymundo González en que no hay evidencia ni investigación en su contra que lo vinculen con los hechos denunciados por el Nido de Víboras porque ese era precisamente el objetivo: protegerlo para no salpicar hacia arriba, como se hace referencia en la información que hoy replica. Lo publicado en este espacio sobre este caso concreto, efectivamente es una simple apreciación del autor del texto (se trata de un género periodístico de opinión) pero a partir de testimonios y mensajes recabados que denuncian abusos, corrupción o irregularidades desde las entrañas del Poder Judicial.
AHORA resulta que don Raymundo es una blanca palomita y en su réplica hasta se pretende deslindar de su jefe Carlos Lima al enfatizar que actualmente funge como ‘asistente legal dentro del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Quintana Roo’, no específicamente en la Novena Sala que preside el polémico togado a quien le urge desmarcarse de escándalos públicos pues ya de por sí carga a cuestas con los propios como para que le pongan los reflectores ahora que se jacta de ejercer como presidente de facto del Poder Judicial mientras que Heyden Cebada es el presidente de jure. Al interior todos saben quién comanda el mercado de la justicia en que se ha convertido la actuación de juzgados y tribunales estatales donde, por instrucciones superiores, se vende al mejor postor.
