NIDO DE VÍBORAS

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Por KUKULKÁN

HASTA sus adversarios en el estado reconocen en silencio que el presidente Andrés Manuel López Obrador está dejando importantes obras de infraestructura urbana que prometen en corto plazo detonar el desarrollo en Quintana Roo, de cumplirse las expectativas proyectadas por la Cuarta Transformación para la región sureste del país. Para los cinco estados que la conforman (con Chiapas, Tabasco, Campeche y Yucatán), 2023 empezó con ajetreo de trabajadores y traqueteo de máquinas, día y noche, para la construcción del Tren Maya que plantea ser estrenado en diciembre entrante.

EN ESPECIAL en Quintana Roo, el Tren Maya tendrá 12 de las 35 estaciones y paraderos que contempla el total de la ruta de mil 500 kilómetros la cual recorrerá una vez en marcha. A este paquete de obras se suma el aeropuerto en Felipe Carrillo Puerto, frontera con Tulum, donde habrá una estación del gran proyecto ferroviario. Del extremo norte del estado, en Cancún empezó desde hace un año la remodelación de la avenida principal, boulevard Luis Donaldo Colosio, que conecta a este destino turístico con el resto del estado.

CON RECURSOS federales también se echó andar el ‘Programa Integral para el Desarrollo de Proyectos Estratégicos en Cancún’, un esfuerzo del gobierno federal para mejorar la conectividad entre el aeropuerto y la zona turística del principal destino, el cual contempla cuatro grandes obras: el Bulevar Luis Donaldo Colosio, la Avenida Chac Mool, el Puente Vehicular Nichupté y el Distribuidor Vial del Aeropuerto. No se trata de proyectos nuevos, en el pasado sólo existieron en el discurso, pero es hasta ahora que comienzan a verse a partir de sus avances en obra.

LA BOLSA de recursos federales para este paquete de obras es de 45 mil millones de pesos, que supera el presupuesto de egresos autorizado para el gobierno estatal de 40 mil millones de pesos. Esto habla de la confianza que el inquilino de Palacio Nacional le tiene a la gobernadora Mara Lezama Espinosa quien ha aportado su granito de arenaponiendo en práctica su vocación innata de gestora con resultados. Ella fue quien casi suplicó al presidente que invirtiera en la remodelación del bulevar Colosio y la obra empezó hace un año cuando todavía era presidenta municipal en Benito Juárez; lo misma situación con el Puente Nichupté que la administración de Carlos Joaquín, que ya venían frotándose las manos por el negocio, pretendía que fuera de cuota; se decidió que será gratis y sin intervención de la iniciativa privada.

ESTE fin de semana Mara Lezama lo volvió hacer. Convenció al presidente para autorizar de la mega bolsa de fondos públicos para llevar a cabo la ampliación del libramiento 180-D, avenida que une las carreteras Cancún-Mérida con la Cancún-Tulum. Su trayecto pasa a un costado del aeropuerto y de la nueva estación del Tren Maya. Todo un tramo será ampliado a cuatro carriles, actualmente es uno de ida y otro de vuelta, contará con dos distribuidores viales, camellón central, iluminación, acotamiento y carpeta asfáltica. ‘En este gobierno humanista y progresista, el de la transformación profunda en la vida de las personas, se trabaja de forma coordinada para que el éxito del turismo se refleje en la mesa y los bolsillos de las y los quintanarroenses’, celebró la gobernadora.

@Nido_DeViboras