Por KUKULKÁN
LOS OPOSITORES al presidente Andrés Manuel López Obrador ahora lo responsabilizan de haber convertido a Xóchitl Gálvez como su candidata a la presidencia de la república dentro de la oposición. Aunque las plumas más optimistas del bloque conservador celebran que haya construido su propio Frankenstein que podría revertirse en su contra y arrebatarle la presidencia, los pesimistas sostienen que todo es una estrategia del inquilino de Palacio Nacional para imponer a su ‘corcholata’ predilecta Claudia Sheinbaum y la senadora hidalguense es otra de sus fichas para legitimar el proceso electoral de 2024 e instaurar un régimen comunista —una total falacia en un mundo dominado por el comercio capitalista—.
LA POSTURA que el presidente ha dado en sus mañaneras es que Xóchitl es la candidata del ‘Supremo Bloque Conservador’, encabezado por el ‘traficante de influencias’ Claudio X. González con el objetivo de presentar ante la sociedad un perfil más ciudadano, de origen indígena y parte de la cultura del esfuerzo. ‘¿Por qué deciden a favor de la señora Xóchitl?, porque ellos suponen que si nació en un pueblo (El Valle del Mezquital en Hidalgo) va a tener el apoyo del pueblo’, sentenció el mandatario federal. Todos se deslindan públicamente de Xóchitl, pero hay optimismo de triunfo por parte de aquellos que ven a la senadora como una esperanza para frenar a la Cuarta Transformación.
TODAVÍA falta que los aliados PAN, PRI y PRD se decidan si va Xóchitl —aprovechando su fugaz éxito en redes sociales—, Santiago Creel o Enrique de la Madrid como la electa o electo por la alianza opositora. Por no estar de acuerdo con el método de la alianza los primeros en bajarse de la contienda fueron la senadora Lilly Téllez, así como el senador Germán Martínez del Grupo Plural quien adelantó que la competencia no sería limpia y que los dados ya estaban cargados por parte del sector empresarial que está detrás de esta alianza.
Y CUANDO parecía que no habría más desbandadas, los senadores del PRI Miguel Ángel Osorio Chong, Claudia Ruiz Massieu, Eruviel Ávila y Nuvia Mayorga, así como 250 ex legisladores, ex alcaldes y ex dirigentes locales renunciaron a su militancia partidista y anunciaron la conformación del nuevo movimiento ‘Congruencia por México’. Aunque ninguno de ellos se lanzó en contra de la alianza opositora, sí criticaron el método implementado por el presidente del PRI para designar a la candidata o candidato presidencial además de responsabilizar a su líder nacional Alejandro Moreno Cárdenas de las derrotas electorales que ha sufrido el tricolor durante los últimos cinco años, al pasar de doce a sólo dos gubernaturas.
LA SORPRESIVA renuncia de los senadores desató suspicacias en el sentido de prestarse al juego del presidente López Obrador que ha puesto a todos a jugar con sus propias fichas, convirtiendo a sus adversarios en sus principales promotores al seguirlo metiendo en la boleta electoral con la narrativa de que seguirá gobernando aún después de que concluya su gestión sobre todo porque sigue gozando de la confianza de más del 60 por ciento de la población, que cree que ha hecho las cosas bien y que se resisten a que el poder regrese al grupo que lo controló durante 36 años de privilegios y excesos de poder lo que terminó por darle el triunfo en 2018 al movimiento lopezobradorista.
