- La temporada de anidación de tortugas este año es atípica por su larga duración.
IGNACIO CALVA
CANCÚN, Q. ROO.- El último de los nidos de tortugas marinas de esta temporada de anidación estará eclosionando en enero de 2024, un récord en esta materia, dio a conocer la directora de Ecología de Benito Juárez, Tania Fernández Moreno.
En este sentido, la funcionaria explicó que estarán dando por cerrada la temporada de tortugas marinas de este año alrededor del 5 de diciembre, al tratarse de una temporada atípica, que comenzó en abril y cerrará a inicios de diciembre, a diferencia de años anteriores cuya temporada se daba de mayo a octubre.
Si bien aún no se cuenta con la cuenta final de tortugas eclosionadas, Fernández Moreno apuntó que ya se ha superado el número alcanzado el año pasado, con más de un millón de crías liberadas con corte al 22 de noviembre, además de que aún se tienen nidos resguardados, y el último de ellos estará eclosionando hasta enero del próximo año.
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Recordó que para esta temporada se contó con 57 corrales tortugueros y la participación de 58 personas para la atención, salvaguarda y liberación de las tortugas, sus huevos y las crías; 18 de ellos son personal del campamento tortuguero, quienes cuentan con las certificaciones y capacitaciones requeridas para el manejo de estas especies y 40 voluntarios para apoyarlos en estas labores.
Además, indicó que de las cuatro especies de tortuga marina que regularmente anidan en las costas cancunenses, este año sólo se registraron nidos de tres, las tortugas Blanca, Carey y Caguama, siendo la Laúd la única que no llegó este año.
Finalmente, enfatizó la importancia de mantener libres de contaminación y tránsito las aguas de los litorales cancunenses, pues las tortugas marinas son sensibles a estos cambios, lo que provoca que recalen con problemas como tumoraciones y problemas en la piel que llegan a evitar que abran los ojos, la boca, o inmoviliza sus aletas.
Así como tortugas que recalan con golpes de propelas por botes o motos acuáticas, como la que se encontró hace unos días en Puerto Juárez, que la mayor parte de las ocasiones llegan a las playas muertas o con pocas posibilidades de ser rescatadas.
