Por KUKULKÁN
CON UN MOVIMIENTO que dejó a todos con la boca abierta, el presidente Andrés Manuel López Obrador desplegó su estrategia política este fin de semana, inaugurando en el sureste mexicano tanto el Tren Maya como el sistema de transporte Ie-Tram para la ciudad de Mérida, mientras que en el noreste abrieron todas las llaves del acueducto El Cuchillo II que resolverá la falta de agua en Monterrey en época de estiaje. Pero lo más sorprendente no fue la infraestructura en sí, sino los acuerdos de hacer a un lado los intereses partidistas para atender demandas sociales, lo que por añadidura trajo el reconocimiento de los gobernadores de oposición, Mauricio Vila Dosal (PAN), y Samuel García Sepúlveda (Movimiento Ciudadano).
CONTRARIO al discurso catastrófico empleado sistemáticamente por las dirigencias nacionales de ambos partidos, los gobernadores de Yucatán y Nuevo León reconocieron y agradecieron al inquilino de Palacio Nacional su colaboración para llevar a cabo estas obras modelo para sus respectivos estados. El viernes 15, tras realizar el primer recorrido a bordo del Tren Maya saliendo desde Campeche, Vila Dosal y López Obrador hicieron una escala en la estación Teya para dar el banderazo inaugural al sistema de transporte Ie-Tram, 100 por ciento eléctrico y con tarifas preferenciales para los yucatecos, que comenzó operaciones este sábado en la primera de cinco rutas que brindará este transporte único en Latinoamérica.
DURANTE el acto oficial, el gobernador panista agradeció la coordinación con el gobierno federal para lograr una inversión conjunta de 2 mil 800 millones de pesos, 60 por de recursos estatales; 23 por ciento de la federación, y 16 por ciento de la iniciativa privada. Se trata de un vehículo con autonomía de 350 kilómetros cuya puesta en operación traerá beneficios al medio ambiente pues sacar un autobús antiguo y meter uno eléctrico como este, equivale a tener 170 mil árboles por los próximos 10 años. Para sellar su agradecimiento, Vila Dosal calificó estos proyectos que potenciarán económicamente al sureste del país como ‘modelo’ no sólo para México sino toda Latinoamérica.
EL SÁBADO el presidente estuvo con Samuel García en la inauguración de la última etapa del Cuchillo II en Monterrey desde donde el gobernador le agradeció las acciones coordinadas, especialmente en materia de abasto de agua y seguridad pública, lo que coincide con el momento de gran inversión extranjera y generación de empleos que vive la entidad a raíz del nearshoring. ‘Gracias a su sensibilidad, a su equipo, hoy Nuevo León puede decir con todas sus letras que hemos resuelto la crisis de agua y con este acueducto que traerá el doble vamos a poder sortear los años venideros en lo que sacamos adelante otros proyectos de largo plazo que se van a requerir para Nuevo León’, expuso el gobernador.
COMO testigos de honor presenciaron el acto directivos y representantes de las empresas neoleonesas a cargo de la construcción, muchas de ellas que no comulgar con la ideología presidencial: Grupo Garza Ponce, José María Garza Treviño; Maiz Mier, José Sebastián Maiz García; Arendal, Jesús García Pons; Tordec, David Torres Lobo; Recsa, Humberto Armenta González; Cosene, Alejandro Palacios Ochoa; Dycusa, Javier Ildefonso Balli Martínez; Hércules, Braulio Campos González; Locsa, José Carlos López Pérez; Java, Javier Trujillo Ávila; Tubacero, Joseph Woldenberg, Tubac, Fabián Marcelo Arrambide; Villacero, Enrique Mustieles Ramírez; RuhRPumpen, Marcelo Adrián Elizondo Garza; Dirac, Mario Salazar Lazcano; Grupo Hermes Infraestructura, Alberto Pérez Jácome; y Grupo Alfa, Álvaro Fernández Garza.
LA JUGADA del inquilino de Palacio nacional fue como un movimiento maestro en un juego de ajedrez político. Después de años de tensiones y confrontaciones, logró que dos gobernadores de partidos rivales le aplaudieran públicamente. ¿Cómo lo hizo? ¿Magia? ¿O simplemente una estrategia astuta? En el bando del PAN y del PRI, las filas están que arden. La lealtad partidista parecía inquebrantable, pero López Obrador logró abrir brechas en esta sólida muralla. El enojo en sus filas es palpable. ¿Traición? ¿O simplemente pragmatismo político?
AMLO ha demostrado una vez más que su estilo de hacer política es inusual y efectivo. No sólo se trata de la obra física, sino también esta obra maestra de la política. El juego de alianzas y lealtades cambia constantemente, y AMLO es un maestro en este arte. El Tren Maya y las obras hidráulicas son importantes, pero la política detrás de ellas es aún más intrigante. En este Nido de Víboras, no podemos evitar preguntarnos cuál será el próximo movimiento en este tablero político tan complejo. Sin duda, el presidente ha dado un golpe sorprendente, y el juego está lejos de terminar.
