- Un narcolaboratorio fue asegurado en la sierra de Los Álamos, en Sonora, donde se localizaron 60 toneladas de precursores químicos para la elaboración de narcóticos.
STAFF / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- Un narcolaboratorio fue asegurado en la sierra de Los Álamos, en Sonora, donde se localizaron 60 toneladas de precursores químicos para la elaboración de narcóticos, por lo que se trataría de la “cocina” más grande detectada en el actual sexenio.
El lugar fue ubicado a 10 kilómetros al noroeste del poblado de Mojar, a 360 kilómetros de Hermosillo, un área superficial de 2 mil 500 metros cuadrados, dividido en tres secciones.
“Fueron asegurados más de 300 tambos con capacidad de 200 litros con líquidos, además de sustancias en sacos y cajas, tanques de gas estacionario, costales de 25 kilogramos cada uno, que contenían diversas sustancias.
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“Asimismo se aseguraron plantas industriales de energía eléctrica, depósitos de agua con mangueras conectadas, una retroexcavadora, una pipa de gas natural y varios hornos de gas, entre otros”, detalló en un comunicado, la Fiscalía General de la República (FGR).
Francisco Sergio Méndez, delegado de la FGR, detalló que en el lugar había 14 hornos para la elaboración de varias drogas que son comercializadas en el país y el extranjero.
“Me comenta el señor General de la 4ta Zona Militar, que es el narcolaboratorio más grande que se ha encontrado en lo que va del sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador”, señaló.
Lo asegurado quedó a disposición del Ministerio Público Federal (MPF), que continúa con la integración de la carpeta de investigación por la comisión de los delitos contra la salud y delincuencia organizada.
De acuerdo con un reporte de la agencia Reuters, de los narcolaboratorios incautados por el Ejército en México, el 95 por ciento estaba en desuso y abandonado.
La agencia de noticias informó en marzo que México había revisado drásticamente al alza el número de redadas de laboratorios desde que el presidente Andrés Manuel López Obrador asumió el cargo en diciembre de 2018, al incluir en su lista de incautaciones cientos de establecimientos inactivos.
Entonces no se pudo establecer qué porcentaje de los laboratorios allanados estaban operativos cuando fueron decomisados.
Ahora, datos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) obtenidos por la agencia muestran que, de los 527 laboratorios asegurados por el Ejército en los primeros siete meses del año, sólo 24 estaban “activos”.
También revelaron un patrón similar en los primeros cuatro años y medio de la administración de López Obrador, con laboratorios inactivos que representaron el 89 por ciento de las mil 658 redadas del Ejército desde que el mandatario asumió el cargo y hasta agosto pasado.
Los datos no especificaban cuánto tiempo habían estado fuera de uso los laboratorios.
