- El primer informe oficial de inflación en Argentina durante la Presidencia de Javier Milei dio cuenta ayer de un aumento de precios de 25.5 por ciento.
STAFF / AGENCIA REFORMA
BUENOS AIRES, ARGENTINA.- El primer informe oficial de inflación en Argentina durante la Presidencia de Javier Milei dio cuenta ayer de un aumento de precios de 25.5 por ciento en diciembre, para sumar un total anual de 211.4 por ciento en 2023.
El dato mensual es el más elevado desde febrero de 1991 en el país sudamericano, cuando aumentó 27 por ciento. Asimismo, el indicador anual se ubicó por encima de Venezuela, donde la inflación se ubicó en 193 por ciento el mes pasado.
Luego de una devaluación del tipo de cambio oficial decretada por el gobernante ultraliberal tras asumir el 10 de diciembre, los rubros con mayores alzas el mes pasado fueron Bienes y Servicios (32.7 por ciento), Salud (32.6 por ciento), Transporte (31.7 por ciento) y Equipamiento y mantenimiento del hogar (30.7 por ciento), detalló el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
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“La división con mayor incidencia en todas las regiones fue alimentos y bebidas no alcohólicas (29.7 por ciento)”, destacó la entidad, que también resaltó los crecimientos en el precio de las carnes, pan y cereales.
La aceleración mensual fue mayor en comparación al 12.8 por ciento registrado en noviembre y, en términos interanuales, se incrementó desde el 160.9 por ciento del mes previo.
Para combatir el aumento de precios y, sobre todo, el déficit de las finanzas públicas, Milei implementó medidas de austeridad que incluyen la reducción de subsidios a las tarifas de energía y de transporte, así como la paralización de obras de infraestructura financiadas por el Estado que aún no iniciaron.
Además, resolvió una devaluación de la moneda de 54.2 por ciento dentro de un régimen de control de divisas vigente en Argentina desde hace años, que contempla una decena de tipos de cambio diferentes.
El peso oficial cotizó a 835 pesos, mientras el dólar informal o “blue” llegó a costar mil 120 pesos ayer.
“Si la inflación de diciembre es 30 por ciento es un ‘numerazo’; veníamos para 45 por ciento”, anticipó el domingo el propio Milei.
Sin embargo, en los supermercados de las afueras de Buenos Aires reinaba la resignación.
“Hoy ni siquiera pueden tomar leche con lo que sale el litro”, lamentó María Ester Espíndola, una jubilada de 65 años.
Los argentinos siguen atormentados por la hiperinflación de hasta 3 mil por ciento que vivieron entre 1989 y 1990 y la dramática implosión económica de 2001.
Ana Albornoz, una niñera de 53 años, compara sus compras actuales con una búsqueda del tesoro.
“Antes iba a un solo súper y ahora tengo que ir a varios para elegir cada cosa”, contó.
En tanto, el Banco Central argentino anunció ayer que pondrá en circulación billetes de 10 mil y 20 mil pesos, incrementando de manera significativa el valor del papel moneda de mayor denominación en Argentina, de 2 mil pesos, emitido desde el año pasado.
El economista ultraliberal prometió en campaña dolarizar la economía y eliminar el Banco Central para terminar con la inflación, que está al tope de las preocupaciones de los argentinos.
