- Xóchitl Gálvez se reunió con miembros de la comunidad científica, cultural y académica en la CDMX.
CLAUDIA SALAZAR / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- Científicos, académicos y miembros de la comunidad cultural de México, que se han sentido agraviados por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, pidieron a Xóchitl Gálvez que se comprometiera con el presupuesto a la educación, la ciencia, la tecnología y la innovación, y que los respete y los escuche.
En un encuentro organizado por su equipo de campaña, la candidata opositora recibió una larga lista de quejas y reclamos en materia de ciencia y cultura.
Gálvez reconoció que aún no está terminada su propuesta en materia científica y cultural, pero presentó los primeros compromisos.
“En este gobierno los científicos, las mentes brillantes que abren la brecha para avanzar y mejorar han sido silenciadas, han sido atacados e incluso perseguidos penalmente.
“En mi gobierno respetaremos la libertad académica, de investigación y de creación, así como la autonomía universitaria. Nunca más un gobierno que persiga la ciencia y la cultura”, planteó.
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La aspirante prometió restablecer los fondos y aumentar el presupuesto para cultura, educación, ciencia, tecnología e innovación.
Así como otorgar mil millones de pesos a los municipios para proyectos culturales.
Garantizó que restituirá la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) y su presupuesto, cuya desaparición, dijo, será un legado de la actual administración.
En un salón del WTC, el profesor emérito de la Facultad de Ciencias de la UNAM, Antonio Lazcano, reclamó la desaparición de la Conabio.
También pidió revertir la Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación aprobada el año pasado, porque representa, dijo, un modelo de ciencia al servicio de la ideología del gobierno.
Recordó que dicha ley aparece en las 100 propuestas de Claudia Sheinbaum, como si fuera un logro.
“Es alarmante que ella, la doctora Sheinbaum y sus operadores políticos, defiendan esa ley como una herencia del presidente López Obrador que hay que conservar.
“Luchar por su derogación, no sólo por la forma en que fue aprobada, sino también porque representa un modelo de ciencia al servicio de la ideología del gobierno, alejado de las necesidades del país, es un elemento indispensable para sanar las fracturas que se generaron entre la comunidad científica y el Estado mexicano”, planteó.
El investigador advirtió que es desalentador que la coalición opositora del PAN, PRI y PRD no haya seguido en la lucha para derogar la mencionada ley, la cual consideró una aberración jurídica y académica.
“Urge un esbozo serio que vaya más allá del carisma personal y las propuestas aisladas”, expuso Lazcano a Gálvez, sobre su falta de propuestas en materia científica.
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