- Ante las imágenes virales del Castillo de Chapultepec siendo parte de una campaña publicitaria de la serie de televisión La Casa del Dragón, el INAH no sólo descalificó la acción, sino que amagó con emprender acciones legales.
STAFF / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- Ante las imágenes virales del Castillo de Chapultepec siendo parte de una campaña publicitaria de la serie de televisión La Casa del Dragón, el INAH no sólo descalificó la acción, sino que amagó con emprender acciones legales contra MAX Latinoamérica.
En fotos y videos difundidos en redes sociales se aprecia el inmueble capitalino intervenido con banderas y pendones alusivos a la protagonista de esta serie con el objetivo de promocionar el estreno de su segunda temporada.
“El Castillo de Chapultepec, en México, fue reclamado por su reina Rhaenyra Targaryen y el consejo negro. Es momento de elegir tu bando”, publicó MAX Latinoamérica en X.
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El INAH, encabezado por el antropólogo Diego Prieto, reaccionó a ello precisando, primero, que se trataba de “un montaje realizado con software de edición de imagen o Inteligencia Artificial”.
“Se informa que las imágenes son falsas, puesto que en ningún momento se han colocado banderas, pendones ni ningún otro material publicitario relativo a dicha producción sobre este inmueble”, señaló la dependencia en un comunicado.
“Y tampoco se ha autorizado la reproducción de imágenes de este espacio para la promoción de la serie en comento. Lo que se aprecia en redes sociales fue generado a través de programas de edición de imagen o inteligencia artificial”.
Por tal razón, la dependencia anunció que, a través de su Coordinación Nacional de Asuntos Jurídicos, llevará a cabo las medidas legales conducentes, “debido a que se trata de un uso indebido de imágenes de un monumento histórico”.
Lo anterior, debido a que el uso de imágenes de monumentos históricos con fines comerciales requieren de un aval del INAH.
Algunos usuarios en redes han reaccionado negativamente al posicionamiento del INAH.
“Era lo más emocionante que le había pasado al Castillo desde Juan Escutia”, ironizó el antropólogo José Ignacio Lanzagorta.
“No fuera permitir uso de inmuebles históricos para narcoseries porque eso está perfecto. O permitir que se destruyan cenotes en la ruta del Tren Maya porque para eso se quedan mudos”, criticó, por su parte, la usuaria @florecitu.
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