- Este miércoles 14 de agosto se hará la subasta que se pospuso del 19 de julio.
IGNACIO CALVA
CANCÚN, Q. ROO.- El miércoles 14 de agosto se llevará a cabo la subasta pública de bienes muebles del Ayuntamiento que se tenía previsto para el pasado 19 de julio, informó Yaraledis del Rosario Tucuch Santos, directora de Patrimonio Municipal, quien recordó que se decidió posponer debido a condiciones climáticas adversas.
En este sentido, apuntó que la convocatoria para el registro de los interesados en participar cerró el pasado 1 de agosto, con la visita ocular a los bienes hecha el pasado día 5, así como la junta de aclaraciones el día 7, por lo que ahora sólo resta realizar el proceso de subasta pública en sí para concluir la enajenación.
Dentro de lo que se está ofertando están bicicletas, motocicletas, automóviles, equipos de cómputo, sillas, mesas, aires acondicionados, ventiladores, entre otros 165 vehículos y 9 mil 626 piezas de mobiliario y equipos de oficina, todos los cuales concluyeron su vida útil y se clasifican como chatarra, valuada en alrededor de 1 millón 200 mil pesos.
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Tucuch Santos declaró que en general, este tipo de subastas para enajenación de bienes suelen destinarse para personas que se dediquen a temas de reciclado, ya que por ley el Ayuntamiento sólo realiza estos procesos con bienes que ya hayan concluido su vida útil.
Además de esta subasta, aprobada por el Cabildo el pasado mes de mayo, Tucuch Santos indicó que podrían llamar a un nuevo proceso, en este caso para los bienes muebles del antiguo Rastro Municipal, como ganchos, fierros, entre otros, si bien aclaró que aún están en el proceso de baja, con un avance de cerca del 80 por ciento.
Sobre este punto, explicó que debido al proyecto que se tiene para la creación del Nuevo Centro de Bienestar Animal en las instalaciones del antiguo Rastro Municipal y los planes para la demolición del espacio y la construcción de uno nuevo, Patrimonio Municipal junto con Contraloría requerían hacer un acta de hechos.
Por ello es que se inició el proceso de baja y el avalúo de los bienes a través de un perito, para después comenzar con la enajenación y subasta pública para que los interesados puedan finalmente disponer de ellos de la mejor forma.