- Turnan iniciativa legislativa a la Comisión de Trabajo y Previsión Social.
STAFF / LUCES DEL SIGLO
CIUDAD DE MÉXICO.- La Ley Federal del Trabajo podría sufrir una modificación significativa si prospera la iniciativa presentada por la diputada Macarena Chávez Flores, que busca reconocer el estrés como una enfermedad laboral.
La propuesta de la legisladora del PRD, que ya ha sido turnada a la Comisión de Trabajo y Previsión Social, plantea la adición de dos nuevos artículos, 476-Bis y 476-Ter, así como la reforma del artículo 487, con el fin de garantizar que los trabajadores afectados por el estrés puedan acceder no sólo a asistencia médica y quirúrgica, sino también a tratamientos psicológicos y psiquiátricos.
El estrés, una respuesta fisiológica a situaciones de presión, se ha convertido en un fenómeno cada vez más común en el entorno laboral actual, con serias repercusiones para la salud física y mental de los trabajadores.
La iniciativa legislativa destaca que el ritmo acelerado y las crecientes exigencias laborales han incrementado los casos de estrés, lo que ha llevado a un aumento en los problemas de salud asociados, como enfermedades cardiovasculares, trastornos del sueño, ansiedad y depresión.
La diputada Chávez Flores, quien impulsa esta propuesta, argumenta que la naturaleza del trabajo ha cambiado radicalmente en las últimas décadas, pasando de requerir principalmente esfuerzo físico a demandar un esfuerzo mental y emocional considerable.
Este cambio ha generado un entorno laboral donde el estrés se ha vuelto omnipresente, afectando tanto el bienestar de los trabajadores como su productividad.
Al reconocer el estrés como una enfermedad de trabajo, subraya la legisladora, se podría proteger a aquellos empleados que, a pesar de padecer síntomas evidentes, no encuentran un diagnóstico claro dentro de las enfermedades actualmente reconocidas por la ley.
Esta reforma, enfatizó, es esencial para evitar que los trabajadores queden desprotegidos frente a las consecuencias del estrés crónico, y para asegurar que reciban el tratamiento adecuado.
Además, se espera que la medida contribuya a un entorno laboral más saludable, al reducir el ausentismo y mejorar el rendimiento laboral, beneficiando tanto a los empleados como a las empresas.
De ser aprobada, esta iniciativa marcará un avance crucial en la protección de la salud mental en el ámbito laboral en México.
