- Aunque los náuticos mantienen números negros, el problema vendrá con la temporada baja entre septiembre y noviembre.
IGNACIO CALVA
CANCÚN, Q. ROO.- El sector náutico ha experimentado una pérdida de alrededor del 20 por ciento del mercado durante esta temporada alta y, si bien aún no se perfila como uno de sus peores años, aún deben enfrentar los meses tradicionalmente bajos.
Así lo indicó Francisco Fernández Millán, presidente de Asociados Náuticos de Quintana Roo. Entre los motivos por los cuales podría estar dándose esta merma en la temporada alta y en el mercado náutico, indicó que están el tipo de cambio, temas electorales tanto en Estados Unidos como el cambio de gobierno en México y, especialmente, las condiciones climatológicas en el estado.
“Sobre todo la parte climatológica en el centro de la ciudad de Cancún, hay muchas lluvias, muchas inundaciones, muchos destrozos naturales dentro de las ciudades, que realmente son ciudades donde la gente viaja en camión, es este turismo económico que realmente trae un poco de poder adquisitivo, pero que creo que tampoco pudo salir. Entonces hay muchas variantes que yo he visto, he analizado y bueno, a sopesar las tempestades y a seguir trabajando”, declaró.
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Adicionalmente, están temas de seguridad que se han tenido en los últimos meses, por lo que, como asociación, llaman a las autoridades para exigir resultados y no dejar pasar estos hechos, además de ofrecer su colaboración según sea necesario.
“Somos una asociación que estamos muy pendientes, estamos pegados con la Fiscalía exigiéndole resultados, porque realmente somos la cara y la ventana del mundo del mar y playa, entonces si no cuidamos esto se nos va a ir la gallina de huevos de oro y esto ya se empieza a sentir como un Acapulco que no queremos.
“Entonces esa es la parte en la que todos tenemos que cuidar nuestro terreno, nuestro patio y apoyar a las autoridades para que esto no vuelva a suceder”, expresó.
Si bien desde hace algunos meses venían observando ciertas tendencias que los llevaban a preocuparse, como el hecho de que ha sido uno de los años con mayor número de días de puerto cerrado, Fernández Millán apuntó que no esperaban llegar a tener una baja tan importante y, aunque mantienen números negros, el problema vendrá con la temporada baja entre septiembre y noviembre.
Agregó que hasta el momento no ha sido necesario activar mecanismos como descansos solidarios o vacaciones anticipadas para sus cerca de 5 mil empleados, ni se han reportado cierres de marinas, algo que esperan poder seguir evitando, pero que depende también de la adaptabilidad de las empresas para abrir nuevos nichos o encontrar nuevas formas de atraer turismo.
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