- AMLO es el presidente que más invirtió en el desarrollo de Quintana Roo.
MARCO ANTONIO BARRERA
CANCÚN, Q. ROO.- El legado para el estado por parte de Andrés Manuel López Obrador como presidente fue que apostó al desarrollo para detonar la economía y mejorar la calidad de vida de los quintanarroenses.
Desde el gobierno de la Cuarta Transformación el apoyo fue incondicional con una inversión histórica en infraestructura de alto impacto y en obras de beneficio social de más de 200 mil millones de pesos.
Igualmente, con los programas del Bienestar se benefician a 283 mil 625 habitantes de la entidad a los que se entregaron durante su sexenio 27 mil 480 millones de pesos.
Los apoyos directos se dieron mediante la pensión para personas adultas mayores (97 mil 900 beneficiarios), y las becas universales Benito Juárez de Educación Media Superior (59 mil 696) y Educación Básica (54 mil 425), además de Producción y Fertilizantes para el Bienestar y la Pensión para Personas con Discapacidad.
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En la inversión a la infraestructura, la cereza del pastel fue la construcción del Tren Maya con su doble vía electrificada y 13 estaciones en suelo quintanarroense, desde Nuevo Xcan hasta Nicolás Bravo-Xpujil en Chetumal, como parte de un recorrido que va desde Palenque, pasando por Cancún y llega temporalmente a Playa del Carmen.
Igualmente, lo fue el Aeropuerto Internacional de Tulum “Felipe Carrillo Puerto” que se construyó en tiempo récord sobre un predio de mil 500 hectáreas, que entró en funcionamiento el 1 de diciembre del año pasado.
La nueva terminal aérea tiene la capacidad de atender hasta 5.5 millones de pasajeros al año en su edificio terminal, y cuenta con una pista de concreto hidráulico de 3.7 kilómetros por 45 metros de ancho para recibir aviones de hasta 230 toneladas.
Otra megaobra en proceso es el Puente Nichupté, una vialidad elevada de tres carriles en 8.8 kilómetros sobre el sistema lagunar del mismo nombre, con dos entronques de conexión en los bulevares Luis Donaldo Colosio y Kukulcan.
La relevancia es que será libre de peaje, mejorará la conectividad y aliviará el tránsito vial de la Zona Hotelera, y genera 8 mil 500 empleos directos y 32 mil 600 indirectos.
Un proyecto que está concluido fue la rehabilitación con concreto hidráulico del bulevar Luis Donaldo Colosio, con seis carriles de circulación (tres por cada lado), instalación eléctrica subterránea, un par de puentes peatonales, semáforos, adecuación de retornos y bahías laterales en un trayecto de 13.3 kilómetros, que generó mil 584 empleos directos y 6 mil 337 indirectos.
Y con el Distribuidor Aeropuerto Cancún se mejoró la accesibilidad a la terminal desde la Zona Hotelera y de la carretera federal 307, con lo cual se crearon 356 empleos directos y otros mil 423 indirectos.
Otro proyecto terminado fue la ampliación de 4.5 kilómetros de la Avenida Chac Mool para conectar la Avenida Huayacán con la carretera federal 307, con la creación de 347 empleos directos y mil 389 indirectos.
El proyecto biocultural concluido Parque del Jaguar en Tulum cuidará y regenerará zonas devastadas de mil hectáreas, y se pondrá en valor la memoria indígena con el Museo de la Costa Oriental.
La infraestructura incluyó la instalación de siete accesos a playas públicas en toda la costa del parque, conexión a la estación del Tren Maya, remodelación de un faro con muelle para visitantes que arriben por el mar y la construcción de más de 12 kilómetros de senderos naturales, ciclovía exterior, mirador y módulos de servicios.
Otra obra terminada fue el “Hotel Plaza Tulum”, que es uno de los seis proyectados en puntos estratégicos como parte de la infraestructura turística complementaria de la ruta del Tren Maya que habrá en Palenque, Edzná, Calakmul, Nuevo Uxmal, Chichén Itzá y Tulum.
El sitio cuenta con 352 habitaciones para 704 huéspedes, una zona de vestigios arqueológicos, y áreas verdes y de conservación, a 2.6 km de la urbe prehispánica de Tulum.
Se concluyó también el Mercado del Bienestar Maya con 38 locales de artesanías y 10 de comida, y espacios de infraestructura que detonarán la economía de la localidad de Nicolás Bravo en Othón P. Blanco.
En proceso se encuentra la “Puerta al Mar” que conectará a la Zona Maya con el Mar Caribe, a través de un camino de 55 kilómetros que va desde Felipe Carrillo Puerto hasta Vigía Chico.
Se contempla una glorieta con un monumento histórico y un muelle, cuyas obras en conjunto cumplen un anhelo, una demanda añeja y un derecho legítimo de la población local.
A punto de concluirse está el Parque Quintana Roo que funcionará como una nueva plataforma comercial, enriquecerá la infraestructura urbana y será un sitio de convivencia y esparcimiento para las familias chetumaleñas.
Otros avances en materia de infraestructura de la salud son tres hospitales generales en los municipios de Felipe Carrillo Puerto, Chetumal y Nicolás Bravo, en los que se aplican más de 2 mil 400 millones de pesos.
Y con la apertura de la zona arqueológica de Ichkabal en Bacalar se ofrece a los visitantes la oportunidad de conocer una urbe maya monumental con una docena de estructuras, algunas con más de 40 metros de altura, que las sitúa entre las más grandes del territorio maya, de estilo Petén.
