- Los migrantes que esperan su cita en la frontera de Tamaulipas están buscando acelerar su entrada a Estados Unidos.
MIGUEL DOMÍNGUEZ / AGENCIA REFORMA
REYNOSA, TAMPS.- Ante el temor de que el republicano Donald Trump cancele el programa de asilo humanitario vía la aplicación móvil CBP One, los migrantes que esperan su cita en la frontera de Tamaulipas están buscando acelerar su entrada a Estados Unidos.
El pastor Héctor Silva, administrador de las casas de migrante Senda de Vida, las más grandes de Reynosa y que auxilian en el trámite de asilo, advirtió que se ha concentrado en convencer a los extranjeros para que no se desesperen ni intenten cruzar sin documentos.
Trump iniciará su gobierno el próximo 20 de enero y ha amenazado con cerrar la frontera a los migrantes desde su primer día.
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La app CBP One, implementada por la administración del presidente Joe Biden, brinda desde el año pasado un ruta clara y legal para solicitar el asilo, pero exige iniciar el proceso fuera de Estados Unidos y sólo acudir a los puentes internacionales avalados cuando se les dé un turno.
El programa se considera una de las razones por las que este año bajó la migración indocumentada a Estados Unidos, además de que ha permitido descongestionar las ciudades fronterizas de México, ya que los migrantes —en su mayoría familias— pueden realizar el trámite en cualquier lugar.
“CBP One sigue vigente, y muchos ya quieren ingresar (a Estados Unidos) antes de que llegue el mandatario que ganó (los comicios de noviembre pasado)”, dijo Silva.
El defensor de los derechos humanos advirtió que el miedo alcanza también a los migrantes que ya están en Estados Unidos.
“Hay temor en todo lugar, el temor es que se desconozca el CBP One y se cancelen los trámites”, alertó.
“También los que están en Estados Unidos, porque se les va a suspender todo trámite. Hay temor de los dos lados, el temor está por lo que ya ingresaron por el CBP One y de este lado de la frontera”.
El activista dijo que comparte los temores de que Trump frene los programas de asilo, pero sostuvo que, por el momento, incentiva a los migrantes a usar la ruta legal, aunque mucha gente desea cruzar antes del 20 de enero.
“Se les anima a las familias y personas que no vayan a hacer algo fuera de control. Vamos a ver qué es lo que tiene el presidente para las familias que esperan o tienen cita por el CBP One”, indicó el activista.
Precisó que actualmente hay 700 migrantes viviendo en Senda de Vida I y en la segunda sucursal del albergue hay 200 personas más, principalmente centroamericanos.
Si bien dijo que no están saturados, como llegaron a estarlo en el primer gobierno de Trump, no están listos para una nueva oleada de migrantes ante las caravanas que se forman en el sur de México y la amenaza del republicano de hacer deportaciones masivas.
“No estamos preparados para recibir miles de personas migrantes, antes decíamos cientos, pero ahora hablamos de miles, por esas caravanas”, aseveró.
“Lamentablemente, no tenemos los recursos para alimentar a todos, ya tuvimos años atrás a miles de migrantes viviendo a la intemperie, en monte, en plazas, fuera de los albergues y no queremos vivir eso nuevamente”.
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