- María del Carmen Morales y su hijo, Jaime Daniel Ramírez, fueron asesinados a balazos en un parque de Tlajomulco durante los primeros minutos de este jueves.
STAFF / AGENCIA REFORMA
GUADALAJARA, JAL.- María del Carmen Morales y su hijo, Jaime Daniel Ramírez, fueron asesinados a balazos en un parque de Tlajomulco durante los primeros minutos de este jueves.
La mujer formaba parte del colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco que ha ayudado a localizar restos humanos para que sean entregados a sus familiares.
El caso ocurrió en un parque ubicado en La Villa 32 y Avenida Villa Sur, en el Fraccionamiento Las Villas de Tlajomulco.
Las víctimas se encontraban juntando agua en recipientes, ya que en varias viviendas de la zona no tienen ese servicio, cuando sujetos en motocicleta abrieron fuego contra Jaime Daniel Ramírez.
La madre del muchacho, María del Carmen, también fue atacada.
Ambas personas perdieron la vida en el lugar de los hechos y sus cuerpos quedaron tirados sobre el área verde. Las autoridades no localizaron a los victimarios.
El Colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco informó que con este crimen tuvieron un golpe devastador.
“María del Carmen era una buscadora de justicia y verdad para su hijo desaparecido, Ernesto Julián Ramírez Morales, quien desapareció el 24 de febrero de 2024 en Las Villas de Tlajomulco, Jalisco”, informaron en un comunicado.
Exigieron a las autoridades que se realice una investigación inmediata y exhaustiva para esclarecer los hechos y dar con los responsables del doble homicidio.
También pidieron que se haga justicia para María del Carmen y su hijo Jaime Daniel, así como para Ernesto Julián, cuyo caso sigue sin resolver.
“No más violencia ni impunidad en el estado de Jalisco. Es hora de que las autoridades tomen medidas efectivas para proteger a los ciudadanos y garantizar la justicia”, señalaron en el comunicado.
Además, el colectivo pidió que la federación intervenga en el caso.
“Pedimos a la Presidenta que ejerza presión sobre el estado de Jalisco para que se tomen medidas concretas para prevenir la violencia garantizar la justicia para las víctimas y sus familias”, añadieron.
Actividad peligrosa
El 27 de marzo de 2025, Teresa González Murillo, integrante del colectivo Luz de Esperanza, fue víctima de un intento de secuestro en su domicilio en Guadalajara. Recibió un disparo en el rostro y falleció el 2 de abril tras seis días en estado crítico. Teresa buscaba a su hermano Jaime, desaparecido en septiembre de 2024.
En febrero de 2025, el cuerpo de Sofía Raygoza Ceballos fue encontrado con signos de violencia en Villanueva, Zacatecas; fue una madre buscadora que había confrontado públicamente a las autoridades por la inacción en la búsqueda de su hija desaparecida en 2023. La Fiscalía investiga el caso como un posible feminicidio.
La labor de las madres buscadoras en México se ha vuelto cada vez más peligrosa, ya que desde 2019, al menos 15 defensoras han sido asesinadas en el país, enfrentando amenazas, hostigamientos y ataques armados.
A pesar de las denuncias y exigencias de justicia, denuncian los colectivos, muchos de estos casos permanecen impunes, y las autoridades han sido criticadas por su falta de acción y protección hacia estos colectivos.