- El sector empresarial declaró estar a favor de la implementación de la jornada laboral de 40 horas.
OMAR ROMERO
CANCÚN, Q. ROO.- El sector empresarial declaró estar a favor de la implementación de la jornada laboral de 40 horas, aunque insistió en que debe realizarse de manera paulatina y progresiva.
Esto, además de estar acompañada de un equilibrio fiscal que no comprometa la operatividad de los negocios, por lo que se solicitó un análisis responsable y realista.
La postura fue ampliamente compartida durante un conversatorio organizado por la Coparmex Quintana Roo, donde empresarios de distintas industrias expusieron sus posturas y propuestas.
Jovita Portillo Navarro, presidenta de la Coparmex Quintana Roo, expresó que respaldan la mejora en las condiciones laborales.
No obstante, destacaron que también es vital preservar el capital productivo y tomar en cuenta el panorama económico global, la realidad nacional y la escasez de personal.
“Si bien, habrá un programa piloto de esta reforma, sí debe de haber continuidad de las mesas tripartitas a efecto de ir analizando y evaluando los resultados que se van dando a lo largo del periodo que va a durar ese piloto y cuando ya esté establecido”.
Añadió que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) debe presentar el proyecto a finales de este mes, con la finalidad de que pueda ser analizado y aprobado por el Congreso de la Unión en septiembre.
Otro empresario participante señaló que, al elevarse los gastos operativos de las empresas, esto puede repercutir en las utilidades netas y por lo tanto en su reparto, siendo otra disminución económica en el bolsillo de los trabajadores.
En el conservatorio también se resaltó el impacto que podría generar en sectores como alimentos y bebidas, donde las propinas representan una parte significativa del ingreso, pues repartirlas entre más colaboradores disminuiría los montos individuales.
Entre las propuestas que emitieron en este encuentro se encuentra la implementación gradual, según el tamaño y sector de la empresa; la realización de un programa piloto para monitorear resultados y ajustar la estrategia con base en evidencia.
Además, eliminar la limitación legal conocida como “regla de tres de tres” para las horas extras, permitiendo un acuerdo entre patrón y trabajador sobre compensación por tiempo adicional.
Aunado al acompañamiento con beneficios fiscales temporales, entre ellos, exenciones, deducciones al 100 por ciento de nómina, subsidios, capacitación y mecanismos de apoyo a la productividad.