Se declara Sheinbaum invencible con el pueblo 

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  • “Por más campañas sucias, por más alianzas con grupos de interés, por más consultores que inventen calumnias, no vencerán al pueblo de México ni a su presidenta”, aseguró.
STAFF / LUCES DEL SIGLO 

CIUDAD DE MÉXICO.- En el marco del séptimo aniversario de los avances del gobierno de la Cuarta Transformación, la presidenta Claudia Sheinbaum envió un mensaje político directo: México no regresará al régimen de privilegios del pasado y resistirá —dijo— los ataques y campañas mediáticas financiadas desde sectores de la derecha nacional e internacional que buscan desacreditar al proyecto iniciado en 2018.

Durante su intervención, Sheinbaum recordó que el triunfo electoral de Andrés Manuel López Obrador marcó “el renacimiento de México”, un punto de quiebre histórico donde el país decidió romper con un modelo que, por décadas, permitió que grupos económicos influyeran en la toma de decisiones públicas. Para la mandataria, esa separación entre poder económico y poder político es hoy una conquista irrenunciable del pueblo.

Mensaje dirigido a los detractores del proyecto

A lo largo del discurso, Sheinbaum trazó una línea clara entre su gobierno y los periodos anteriores, a los que atribuyó corrupción, desigualdad, violencia y entrega de recursos públicos a intereses privados. En contraste, aseguró que la 4T representa un modelo democrático donde el Estado gobierna para todas y todos, especialmente para quienes habían permanecido al margen del desarrollo.

En esa narrativa, la presidenta enmarcó las críticas recientes como parte de una estrategia articulada desde sectores conservadores que —afirmó— buscan deslegitimar a su administración mediante campañas sucias, manipulación en redes sociales, compra de bots y difusión de informaciones falsas en medios nacionales e internacionales.

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Sheinbaum fue enfática: “Por más campañas sucias, por más alianzas con grupos de interés, por más consultores que inventen calumnias, no vencerán al pueblo de México ni a su presidenta”. El mensaje, cargado de firmeza, buscó no solo responder a sus críticos, sino fortalecer la idea de que la 4T mantiene respaldo popular y un rumbo definido.

Un llamado a no volver al pasado

La presidenta insistió en que México no puede regresar al esquema donde la justicia y las decisiones públicas favorecían solo a una minoría. Subrayó que la eliminación de privilegios fiscales, como la condonación de impuestos, forma parte de una institucionalidad que debe defenderse ante los intentos de restauración conservadora.

Dijo que quienes hoy cuestionan al gobierno no han entendido que el país ya cambió y que la ciudadanía no está dispuesta a volver a un modelo que generó desigualdad y pérdida de soberanía.

El “segundo piso” de la Transformación

Sheinbaum también aprovechó el aniversario para reforzar su proyecto a futuro: la construcción del “segundo piso” de la Cuarta Transformación. A poco más de un año de iniciar su administración, aseguró que se consolida un gobierno honesto, cercano a la población y comprometido con una modernidad que surge “desde abajo”, sin excluir a nadie y sin renunciar a la justicia social ni a la protección del medio ambiente.

El mensaje político de fondo fue claro: la 4T no es solo un proyecto de gobierno, sino una respuesta histórica a décadas de desigualdad y corrupción, y pese a las presiones externas, seguirá avanzando con una narrativa centrada en la legitimidad democrática y el respaldo popular.

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