- La “refinería” clandestina hallada en Veracruz estaría vinculada a la empresa Energía Ecorenovable, que ofrece “combustibles alternos”.
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CIUDAD DE MÉXICO.- La “refinería” clandestina hallada en Coatzacoalcos, Veracruz, donde las autoridades encontraron 500 mil litros de crudo de procedencia ilícita, estaría vinculada a la empresa Energía Ecorenovable, que ofrece “combustibles alternos”.
La empresa ya había sido bateada por las autoridades ambientales al intentar instalar en Coatzacoalcos una planta en un terreno de 12 hectáreas.
El proyecto contemplaba el procesamiento de hasta 144 mil toneladas anuales de residuos contaminados con hidrocarburos.
Sin embargo, en junio de 2019, la propuesta fue rechazada por falta de compatibilidad con el ordenamiento ecológico regional, deficiencias técnicas y ambientales, y opiniones negativas de instancias estatales y municipales.
Un año después, en 2020, fue requerida por la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) al detectarse que inició obras sin autorización ambiental.
Desde entonces, refieren fuentes oficiales, la empresa no ha presentado nuevas solicitudes, no aparece como promotora activa en bases oficiales de Semarnat, Asea o Profepa, ni registra proyectos, operaciones o trámites públicos hasta junio de 2025, lo que sugiere inactividad formal, pero posible reconversión operativa al margen de la normatividad vigente.
Energía Ecorenovable, S.A. de C.V., es una empresa mexicana constituida en 2012 en Villahermosa, Tabasco, por los socios Ramón Pérez Córdoba y Sandra Luz Villegas Abad, registrada formalmente ante el Diario Oficial de la Federación.
Su objeto social incluye servicios de ingeniería para la conservación de energía, así como el manejo y reciclaje de residuos industriales, particularmente residuos peligrosos.
En octubre de 2018, la empresa presentó ante Semarnat una Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) para la construcción y operación de una planta de tratamiento de residuos en el ejido Gavilán de Allende, en la localidad de Villa Allende, Coatzacoalcos, cerca de los complejos petroquímicos “Pajaritos” y “Morelos”.
EL OPERATIVO
Derivado de labores de inteligencia de campo y vuelos de reconocimiento con drones, autoridades federales de seguridad detectaron hace algunas semanas una infraestructura operativa compatible con una refinería a baja escala.
Las autoridades recolectaron evidencia sobre la presunta operación clandestina y la posible vinculación con el mercado ilícito de hidrocarburos.
Fuentes de seguridad aseguraron que observaron componentes destinados al reprocesamiento de hidrocarburos líquidos, como cajas calientes, columnas fraccionadoras, tanques de mezcla, líneas de conducción y sistemas de calentamiento térmico, lo que permite conocer que, a través de esta planta, se pueden derivar productos como diésel artesanal o alternativo, nafta ligera o solventes y aceites tratados o combustóleo ligero.
Se indicó que la inspección visual y el análisis de infraestructura permitieron establecer indicios claros de operación clandestina, con afectaciones potenciales en materia ambiental, operativa y legal, además de carecer de sistemas visibles de seguridad.
El cateo, reportado el miércoles por el Secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, se efectuó con el apoyo de la Fiscalía General de la República (FGR), a través de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada, y personal de la Gerencia de Coordinación e Inteligencia Logística de Pemex, y derivó en la apertura de la carpeta de investigación FED/FEMDO/FEIDMHDARV-VER/0000560/2025.
Durante el cateo, las autoridades realizaron una inspección técnica detallada, recolectaron muestras físicas del contenido de los tanques para su análisis y constataron la inexistencia de documentación legal.
UBICACIÓN ESTRATÉGICA
La “refinería” clandestina fue ubicada a costado de la carretera Minatitlán-Nuevo Mundo, sobre la carretera 180D, a unos 10 minutos del Complejo Petroquímico La Cangrejera.
De la planta de etileno de Pemex, sobre la carretera Coatzacoalcos-Villahermosa, sólo hay que avanzar hacia el Ejido 5 de Mayo y dar vuelta a la izquierda en la carretera Minatitlán-Mundo Nuevo, unos dos kilómetros.
La refinería a escala cuenta con un acceso sin pavimentar, una caseta de vigilancia y dos portones blancos.
En el sitio fueron montados sistemas de reacción, donde entra el crudo para procesarlo a gasolina o diésel.
También fueron hallados sistemas de hidrotratamiento catalítico, mediante las cuales ocurre la transformación de hidrocarburos pesados en fracciones medias y ligeras; equipos de destilación, de oxidación química de los hidrocarburos, de mezcla de gases, vapor de agua, entre otros procesos.
DIRECTIVOS
La empresa Energía Ecorenovable fue dada de alta en Villahermosa, Tabasco, en 2012, por Ramón Pérez Córdoba, experto en reducción de la viscosidad de crudo pesado, fabricación de solventes, reciclaje de recortes de perforación a base de petróleo y fabricación de equipos, de acuerdo con información disponible en su perfil profesional.
También figura en la constitución de esa empresa Sandra Villegas Abad, quien tiene más de 30 años de experiencia en el ramo petrolero y quien reporta ahora actividades independientes.
Valentina Dionicio García se registró en 2020 como su representante legal, ante las autoridades ambientales, en los trámites para la instalación de la planta en Villa Allende.
Dionicio fue citada a una audiencia en febrero de 2020 ante la ASEA para dar cumplimiento a la regulación ambiental de un proyecto de manejo integral de residuos peligroso del sector hidrocarburos, en el supuesto de haber iniciado obras sin contar con la MIA.
“Energía Ecorenovable es una compañía que ofrece combustibles alternos, aceite base fluido de perforación, diluyente crudos pesados, etc. Estamos a tus órdenes en Toluca, México; Mérida, Yucatán; Coatzacoalcos, Veracruz y en Villahermosa, Tabasco”, refiere su ficha comercial.
Sin embargo, la empresa tuvo problemas en Mérida, Yucatán. En 2019, vecinos de las zonas de San Antonio Hool, Dzityá, Las Américas y Caucel se quejaron a través de redes sociales por un fuerte olor a aceite quemado, lo que causó a la comunidad desde náuseas y fuertes dolores de cabeza hasta alergias en la piel.
La planta se instaló en medio de zonas residenciales en la comisaría de Dzityá, a 24 kilómetros de centro de Mérida. Vecinos de Las Américas recabaron firmas para que la autoridad atendiera el daño ambiental.
