- El número de socavones en la Ciudad de México aumentó 107 por ciento respecto del año anterior.
STAFF / AR
CIUDAD DE MÉXICO.- El número de socavones en la Ciudad de México aumentó 107 por ciento respecto del año anterior.
Entre el 1 de enero y el 3 de septiembre, la Secretaría de Gestión Integral del Agua (Segiagua) contabilizó 166 hundimientos contra los 80 reportados el año pasado en el mismo periodo.
Las dos Alcaldías que registran mayor presencia de socavones son Gustavo A. Madero e Iztapalapa, donde han ocurrido 75, de acuerdo al recuento de la Segiagua.
Especialistas atribuyeron el incremento a factores como las lluvias récord ocurridas este año, la edad de la red de desagüe y el crecimiento desordenado de la mancha urbana.
El 23 de agosto una mujer resultó lesionada al caer en un socavón de 6 metros de profundidad que se abrió cuando caminaba sobre el andador de Avenida Talismán y Eduardo Molina, en la Alcaldía Gustavo A. Madero, y el 13 de septiembre un camión refresquero colapsó totalmente en un hundimiento en la Colonia Renovación, Alcaldía Iztapalapa.
En el segundo caso, el socavón tenía inicialmente 5 metros de ancho, pero sus dimensiones incrementaron en los días siguientes hasta alcanzar alrededor de 15 metros, por lo que 27 personas debieron ser desalojadas de los inmuebles contiguos.
Actualmente, en paralelo a los trabajos de atención, la Alcaldía Iztapalapa mantiene labores de monitoreo en la zona, donde se vigilan posibles desplazamientos en las viviendas próximas.
La cavidad se fue formando por la fuga de agua que presentaba el drenaje. El líquido socavó la tierra bajo el pavimento hasta que este se rompió por el peso del camión.
“No lo vemos, pero (el agua) deshace poco a poco las partes bajas o se infiltra por algunas partes de la carpeta asfáltica, de las mismas casas y reblandece, deshace y se cae un gran tramo”, explicó el especialista Oscar Rivera, especialista del Colegio de Geografía de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM.
Luis De la Cruz, especialista en Ingeniería Hidráulica, explicó que en algunos casos las fracturas en la red de drenaje se deben a los hundimientos que ocurren en el subsuelo por la extracción de agua.
“El agua iba a unos 5 metros por segundo de velocidad y entre esa velocidad, la erosión que genera la misma velocidad y el tipo de suelo, se deslava muy rápido y no hay forma de que cierres el drenaje. En una tubería de agua es más fácil parar”, resaltó.