- Las mujeres que deciden ingresar a las filas policiales se ven sometidas a “piropos ofensivos, solicitudes o insinuaciones con connotación sexual”.
RUBÉN TORRES
CANCÚN. Q. ROO.- Ataques contra mujeres policías son muestra de la violencia de género que existe hacia ellas, alertaron participantes del foro “El camino hacia reformas con perspectiva de género en la Policía”.
“No se puede entender la violencia contra una mujer policía. Se puede aceptar que rompan, pinten y destrocen cosas, pero una feminista nunca lastimaría a una mujer policía”, aseveró Olivia Tena, investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La catedrática consideró que son tan condenables los hechos violentos ocurridos en la Ciudad de México durante las manifestaciones por el Día Internacional de la Mujer, como los suscitados en la explanada del Ayuntamiento de Benito Juárez el 9 de noviembre de 2020 cuando elementos policiales dispararon contra manifestantes feministas.
“Cuando hay violencia contra las mujeres policías es inequitativo y desigual, al igual que preventivos armados disparen contra la multitud, entre ellas mujeres en Cancún, Quintana Roo”, señaló la especialista durante su intervención en el evento virtual organizado por Causa en Común.
Pilar Déziga, investigadora de esa organización, explicó que las policías aparecieron en nuestro país en 1930 con “La Policía Femenina” y hasta el momento son parte del 20 por ciento de la fuerza preventiva o de investigación, las cuales, sin embargo, siguen siendo sometidas a algún tipo de violencia de género, machismo o abuso sexual.
En tanto, Shauna Hemingway, consejera de la Embajada de Canadá en México, nación que realiza una serie de respaldos de cooperación al desarrollo policial femenino en el municipio de Nezahualcóyotl, Estado de México, manifestó que cualquier entidad o municipio que pida apoyo, como podría ser Quintana Roo lo harían con mucho gusto.
De acuerdo con lo que documentó la investigadora de Causa en Común, las principales afectaciones a las que se ven sometidas las mujeres que deciden ingresar a esas filas policiales son “piropos ofensivos, solicitudes o insinuaciones con connotación sexual”.
Además de “insultos, manoseos, arrimones o tocamientos e intento de violación”, casos donde el agresor no es denunciado ni en el 20 por ciento de las situaciones. Esos son ataques ocurren desde que las mujeres ingresan a los Institutos de Formación Profesional para ser parte de las corporaciones policiales, advirtieron.
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