- Las palmeras de la Ciudad padecen un proceso de mortandad biológica, acelerado por la sequía. Éstas lucen secas, pálidas y contraídas.
IVÁN SOSA / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- Las palmeras de la Ciudad de México padecen un proceso de mortandad biológica, acelerado por la sequía. Éstas lucen secas, pálidas y contraídas, lejos del esplendor verde y las hojas extendidas.
“Es una plaga o enfermedad que afecta a las palmeras canarias y datileras, está causando estragos en la Ciudad”, explicó el investigador del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), Héctor Benavides.
La sequía no solo en la Ciudad sino en el País ha acentuado la mortandad, en un proceso en el que se ha integrado el ataque de un insecto denominado “picudo”, aún cuando hace falta precisar si es sólo esta plaga, comentó el experto.
“Cuando los árboles están sujetos al estrés hídrico, por falta de agua las plantas se hacen más susceptibles al ataque de plagas y enfermedades”, apuntó Benavides.
El árbol que da nombre a la Glorieta de la Palma, sobre Avenida Paseo de la Reforma, también está afectado, aun cuando todavía muestra más ramas verdes que café. En tanto, una parte de las palmeras que le rodean exhiben la pérdida de frescura.
Las autoridades desarrollan con especialistas tratamientos para salvar a las que aún no se han contagiado, lo que incluye enriquecer el suelo, expuso la Secretaria de Medio Ambiente, Marina Robles.
“Hay palmeras que ya están muertas y hay que quitarlas, cambiarlas, trasladarlas con mucho cuidado para que no se contagien otros individuos”, comentó Robles.
Vecinos de Paseo de las Palmas, Doctor Vértiz, Avenida Universidad o Diagonal San Antonio, con alineaciones de palmeras sobre los camellones, observan la estampa declinante de lo que hace unos meses eran palmeras sanas.
Recientemente se reportó que en Coyoacán las palmeras estaban siendo afectadas también por una plaga.
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