- Harris pidió a sus interlocutores que fueran “sinceros”, con el fin de conseguir así “una perspectiva” sobre las necesidades, los deseos y las esperanzas del pueblo guatemalteco.
STAFF / AGENCIA REFORMA
GUATEMALA, GUATEMALA.- Durante su visita a Guatemala, la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, advirtió a los migrantes que no serán recibidos en el país norteamericano.
“Quiero ser clara para la gente de esta región que está pensando en hacer ese peligroso viaje a la frontera entre Estados Unidos y México: no vengan. No vengan”, subrayó.
“Si vienen, los regresarán. Desalentemos a nuestros vecinos y familiares en un trayecto peligroso del que los únicos que se benefician son los coyotes”.
Kamala Harris indicó que los líderes regionales y estadounidenses deben dar a la gente un sentido de esperanza de que la ayuda está en camino.
“Esto debe ir acompañado de relaciones y confianza, de resultados tangibles para convencer a la gente de que hay una razón para tener esperanzas sobre su futuro y el futuro de sus hijos”, apuntó.
Afirmó que mantuvo conversaciones “sólidas” con el Presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, sobre la migración y el combate a la corrupción.
“Discutimos que, fundamentalmente, la mayoría de la gente no quiere salir de casa, no quiere salir del lugar donde se habla el idioma que conocen”, reconoció.
La Vicepresidenta, además, señaló que se ampliará la lucha contra la corrupción en la región.
“La corrupción no conoce fronteras”, dijo. “Tenemos que seguir el dinero y tenemos que detenerlo”.
Anunció que Estados Unidos dará 40 millones de dólares por tres años para empoderar a jóvenes guatemaltecas.
Puestos de trabajo
Alejandro Giammattei, por su parte, propuso generar en el país 2.5 millones de puestos de trabajo en los próximos 10 años.
“Para reducir la migración es importante resolver problemas estructurales del país a través de estrategias claras orientadas a la generación de empleo”, enfatizó el Ministerio de Economía guatemalteco.
Luego de su encuentro con Giammattei, Kamala Harris se reunió con 18 líderes sociales de Guatemala, entre los que destacó la presencia de la Premio Nobel de la Paz 1992, Rigoberta Menchú Tum.
Pidió a sus interlocutores que fueran “sinceros”, con el fin de conseguir así “una perspectiva” sobre las necesidades, los deseos y las esperanzas del pueblo guatemalteco.
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